Feria de La Línea

La gastronomía es también protagonista en el recinto ferial

  • Los linenses y visitantes que acuden a la Velada y Fiestas descubren un mundo de sabores que va desde el típico puesto de turrones hasta la cocina más exótica

La extensa variedad de platos y sabores diferentes que se pueden encontrar en los puestos de comida del recinto ferial son un motivo más para que linenses y visitantes se animen a acudir a la Feria a degustar todo tipo de contrastes culinarios.

Los  puestos de turrones y golosinas son una imagen  típica en todas las ferias. Manuel y María Teresa, una pareja natural del municipio cordobés de Aguilar de la Frontera, regentan uno de estos puestos, que lleva más de 20 años acudiendo a la Feria de La Línea, y aseguran que en la provincia de Cádiz se sigue comprando turrón en verano.

Este puesto no sólo se dedica a la venta de turrones, sino que además vende juguetes, golosinas, coco, garrapiñadas y almendrados, ofreciendo una gran variedad de los alimentos preferidos por los más golosos.

Otro tipo de establecimientos de comida son las hamburgueserías, que ofrecen bocadillos, perritos calientes y montaditos. Estos establecimientos tienen mucho éxito en el recinto ferial  ya que después de beber algunas copas siempre se abre el apetito.

El Colorao es el nombre de un grupo de feriantes de Sevilla que ha instalado tres puestos de comida en la Feria de este año, dos hamburgueserías y una heladería.

Ismael Rodríguez es el responsable de estos puestos que llevan instalándose en la Velada y Fiestas desde hace una década, pero estos últimos  dos años ha tenido que reducir el número de sus empleados con motivo de la crisis, ya que los ingresos de todos los feriantes han disminuido.

La comida italiana ha tenido un gran auge en los últimos tiempos, y por ello este año hay puestos que ofrecen las recetas más típicas de este país como pizzas al horno de piedra o  panzerottis de exquisito sabor.

Lo dulce también tiene su lugar en la Feria en la que abundan puestos de helados, gofres, y buñuelos, sin olvidar los algodones de azúcar tan demandados por los niños y niñas que acuden al recinto ferial.

Y de vuelta a casa que mejor que una pata de pulpo recién asado en un puesto típico que sólo se puede encontrar en la Feria de La Línea.

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