Feria de La Línea

Casetas llenas hasta última hora

  • Los linenses y visitantes apuran los últimos momentos en la recta final de la Velada y Fiestas de este año mientras bailan y se divierten con la mejor compañía en el recinto

La Feria se convirtió en el punto de encuentro de muchos linenses y visitantes del municipio durante el pasado fin de semana para aprovechar las últimas horas de la Velada y Fiestas de La Línea de 2010.

A pesar de que las calles del recinto estaban llenas, tanto puestos de comida, atracciones como tómbolas, la mayor concentración de gente se encontró dentro de las casetas.

Como cada año, existe una gran variedad de casetas donde se pudo disfrutar de un buen ambiente para bailar, comer, y sobre todo, pasar un buen rato con los amigos entre charlas y risas. De este modo, todo el mundo tuvo un sitio en la Feria al elegir su establecimiento favorito para pasar la noche.

Algunas casetas están formadas por peñas, por asociaciones y otras por particulares que buscaron ganar algún beneficio durante estos días.

Durante los días entre semana el ánimo de los linenses y visitantes no decayó, aunque algunas noches si se notó que muchos habían preferido quedarse en casa. No obstante, en el fin de semana el recinto se volvió a llenar, sobre todo el viernes y sábado.

Las casetas juveniles fueron uno de los principales reclamos. Algunas veteranas ya en la Feria de La Línea como Turí, Turí, Turí contó con un aforo completo la mayoría de las noches. Las colas en la entrada fueron inmensas en muchas de las casetas, como es el caso de La Salvaora, y en algunos momentos los porteros actuaron por criterio propio para dejar entrar a unos y a otros no.

Aunque pasaba la noche y el sol empezaba a salir, las ganas de fiesta entre los más jóvenes seguía en pie. En muchas de las casetas durante el fin de semana el horario de cierre no se llevó totalmente a cabo, ya que la música se cortó más tarde y el desalojo de la caseta poco después. En este momento, fue cuando los distintos puestos de comida ambulantes hacían la mayor caja. "Terminamos muy tarde, porque cuando cierran la caseta a la gente le entra hambre y es cuando vienen", señaló un churrero del recinto, Antonio Álvarez.

Pero las noches del fin de semana no sólo las aprovecharon los jóvenes. Otros no tanto, se juntaron  en las distintas peñas y casetas con un ambiente más tranquilo, pero con las mismas ganas de pasarlo igual de bien. Las familias también tuvieron un sitio para estar a gusto con sus hijos y más tranquilos por poder tenerlos vigilados, a la vez que comparten las Fiestas con otras familias en sus mismas circunstancias.

Además, para atraer a más gente y que el ambiente no decaiga, las distintas casetas ofrecieron a los linenses y visitantes una gran variedad de actividades que se reservaron para el fin de semana. En la caseta La Alcoba, la actuación de Nacha la Macha llenó el establecimiento. Otra caseta, Amantes de la Copla, concluyó el concurso de sevillanas con la entrega de premios. Cada una promocionó su caseta con unas citas determinadas que se correspondía con la clientela.

Un año más la Feria de La Línea ha sido un éxito. Anoche era el turno de los fuegos artificiales, tras lo cual centenares de linenses se fueron al recinto a apurar las últimas horas de fiesta. Ahora toca descansar tras esta larga semana tan intensa. No obstante, muchos despiden con pena esta Feria y esperan ansiosos la del año que viene. "No acaba ésta cuando quiero que empiece ya la del año que viene, pero bueno, también nos va a venir bien unos días de descanso", dijo Carmen Blanco cuando salía del recinto ferial.

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