Cuando nació la Balompédica Linense, concretamente en el año 1912 -según consta en la Real Federación Española de Fútbol en documento dirigido al club por la Andaluza- ninguno de sus dirigentes podía predecir la repercusión que iba a tener en La Línea un equipo de football. Esos iniciados emprendedores, a saber: Presidente: José Morales, vicepresidente Manuel R. Fierro; secretario: Cristóbal Becerra García; Tesorero: R. García Meléndez y vocales Juan Macías, Juan Jordán Parra y José Sevilla Bau, eran incapaces de imaginar que el deveni de los acontecimientos haría que la Real Balompédica Linense y La Línea de la Concepción se constituyesen en un binomio indisoluble.

El club, en el más extenso sentido de la palabra, y la ciudad se preparan para conmemorar el próximo miércoles que lo que un día no fue más que una valiente iniciativa ha cumplido un siglo de vida. Una fiesta abierta a todos los balonos. A todos los linenses, que tanto monta, y que tendrá lugar con el equipo que conduce Rafa Escobar encaramado a la cuarta plaza del grupo IV de Segunda B, una de las que al final de la temporada dará derecho a pelear por el ascenso a la Liga Adelante.

En esos primeros años se tiene constancia de partidas jugadas por la Balompédica a nivel local y provincial. Equipos locales como el Línea, Victoria Eugenia, La Estrella Blanca, Alfonso XIII, Los Luises... y provinciales como el Olivera y el Balompié, ambos de San Fernando, así como otros más, que se constituyeron en sus contrincantes.

Los datos son fidedignos, y se pueden comprobar en las oficinas del club, cuyas puertas están abieras para todo aquel que quiera ahondar en la dilatada historia de la entidad.

En 1918 se crearon la SD Arenal, Recreativo Linense, El Faro y el C.D. Aurora. Algo más tarde, se fundó el Odd Fellows. Estos dos últimos equipos linenses fueron enemigos deportivos de la Balompédica en todas las competiciones durante algunos años.

1922 fue el año en que la Balompédica Linense le ofrece la Presidencia de Honor a S.M. Don Alfonso XIII; el título de Real fue solicitado a través de la Excelentísima Marquesa de Marzales, que un poco más adelante sería Madrina del club. Aparecería concedido el mencionado título, a través de su intervención, en el Boletín Oficial del Estado. Por último ese mismo año se produce el ingreso en la Federacón Regional Sur.

Pero la mayoría de estos detalles son archisabidos por los aficionados linenses. A cualquier linense al que se le hable de la Balona se le palpa enseguida que sabe que no está hablando de algo baladí, que es profundo, añejo, como el buen coñac, veterano o decano diría, en una palabra. El diccionario Alfa de Salvat dice en referencia a la palabra decano: Miembro más antiguo de una comunidad, junta... Y la Real Balompédica Linense, tiene ganado el Decanato, de sobras.

La recia e histórica Balona -como solía llamarla mi recordado y admirado Reinaldo Vázquez en sus artículos- ha sido cuna de grandes jugadores y entrenadores. De los primeros siempre con la certeza de olvidar a muchos, se puede nombrar, ciñiéndose a los nacidos en La Línea, a los Hermanos Sevilla, Hermanos Ayala, Hermanos Vázquez, Hermanos Uceda, Hermanos Gallardo, Rufo, Pova, Cortés, Peña, Chacón Vidal, Ordóñez...

La Real Balompédica Linens ha pasado en su vida deportiva y económica temporadas buenas y otras menos boyantes como la mayoría de clubes de nuestra Piel de Toro.

Pero este club, a pesar de todos los pesares, ha salido siempre adelante. Con zancadillas, simas en derredor, sinrazones deportivas -que han repercutido en el apartado económico- y un sinfin de accidentes que a las puertas del primer siglo de existencia no parece indicad recordar.

La Balona es poderosa. En una ciudad de apenas setenta mil almas es capaz de concentrar entre ocho-diez mil personas, bien en el Municipal, bien en la Plaza de la Constitución.

Los visitantes al vestusto estadio que le acoge se quedan perplejos cuándo ven la entrada de aficionados en el recinto deportivo, porque a pesar de que el club, no tiene más de dos mil socios, la entrada es bastante superior, lo que contrasta con lo que sucede en ciudades con mucha más población.

Hablar de la Real Balompédica Linense no es fácil. Hay que saber un poco la historia del club y escribir, hay que tener la suficiente documentación, como para no confundir a la persona que tiene el peródico entre sus manos.

Somos muchos, afortunadamente, los que estamos oliendo un perfume embriagador, porque estamos profundamente enamorados de La Línea de la Concepción y la Real Balompédica Linense. Con sus pros y sus contras, dimes y diretes, calmas y tormentas, días de sol y negros nubarrones, viento de levante fuerte o poniente en calma, o sus días de lluvia o su estío casi otoñal. Pero ahí estamos, a las duras y maduras, contra viento y marea.

Son bastantes los aficionados de la Recia, que le han escrito canciones. Unos lo hacen a su escudo, otros a su nombre, otros a lo que representa, a sus futbolistas... pero lo importante es que cantan a la Balona de sus amores. Hasta de una docena de himnos, con diferentes autores, hay constancia en la entidad.

Por si todo los expuesto no es suficiente, va mi Balona y cumple 100 años. Vamos, es que es para presumir, e ir con la cabeza bien alta, gritando a los cuatro vientos que el equipo de mi tierra, el que llevo en el corazón, es centenario. Cualquier cosa. Con la cantidad de vicisitudes, que habrá pasado en su dilatada historia, con buenos y amplísimos triunfos y amargas derrotas. Con ascensos y descensos. Con crisis financieras muy severas,pero ahí está, asomando su corona en su escudo, para decirle al mundo que la Real Balompédica Linense sigue su andadura, para que n uestros hijos y nietos la quieran tanto como nosotros.

Para La Línea de la Concepción tiene que ser un orgullo que su club de fútbol, sin lugar a debates la entidad más representativa de la ciudad, alcance su centenario. Por lo que ello representa, todos los eventos que se organicen en 2012 serán bienvenidos, ya que repercutirá en el Decano del Campo de Gibraltar.

Por eso todos los linenses de todos los lugares de la ciudad y de todos los colores, políticos, culturales, deportivos, todos debemos aunar nuestro sentiminento blanquinegro y gritar al mundo entero:

Dame la mano Balona

que te quiero guiar

en mi barco velero

allá, en alta mar.

Porque cumples 100 años

y centenaria eres

muchos caminos recorriste

y en todos te quieren.

Te veo blanquinegra

con señorío sin igual

mira que eres bonita

igual que tu ciudad.

En mis pensamientos

siempre está presente

mi equipo representativo

Real Balompédica Linense.

1922