Un play-off bajo sospecha

El Comité Nacional de Árbitros de la Federación Española de Baloncesto ha tomado la desafortunada decisión de designar a Francisco Javier Afonso Castillo para el segundo encuentro del play-off de cuartos de final de ascenso a ACB que enfrentará desde mañana al Villa de Los Barrios y al Leche Río Breogán, el que se jugará el viernes en el Soldado Samuel Aguilar. El colegiado canario fue el principal protagonista del monumental escándalo arbitral que se produjo en el primero de los duelos del play-off de 2008 que protagonizaron Alicante y Villa, que decantó del lado local al señalar una inexistente antideportiva de Álex Alba sobre Andriuskevicius.

Martes, 20 de mayo de 2008. A falta de 94 segundos para que finalizase el primer encuentro del play-off entre Lucentum Alicante y Villa de Los Barrios el conjunto gualdiverde se sitúa seis arriba merced a una canasta de Andre Howard. Una sorpresa en mayúsculas estaba a punto de consumarse. En lo que restaba de contienda el conjunto que entrena Óscar Quintana anota dos triples, uno de Fisher y otro, de Coppenrath. En el primero los árbitros ignoran una manifiesta falta de ataque en un bloqueo y en el segundo, Andriuskevicius había permanecido siete segundos en la zona, como demuestran la imágenes de televisión.

Con 65-67 y a falta de siete segundos Afonso Castillo transformó en antideportiva una falta de Álex Alba a Andriuskevicius cuando éste trataba de hacer una bandeja. El banquillo barreño estalló, Moncho Fernández fue expulsado por una doble técnica y con seis lanzamientos libres consecutivos el Lucentum se hizo con un triunfo que a la postre resultó decisivo para la eliminación de los forasteros, que forzaron el tercer partido.

La indiganción entre los visitantes fue tanta que los árbitros (el vasco Uruñuela Uruñuela era compañero de faena de Afonso) retiraron las licencias al técnico compostelano, a su ayudante, el pucelano Hugo López y al alero Francesc Sabaté.

El Comité de Competición, a la vista de los acontecimientos, impuso sólo una sanción de 300, 200 y 150 euros respectivamente a los implicados y los tres pudieron desempeñar con naturalidad sus funciones en el segundo de los compromisos de aquella eliminatoria.

Lo sucedido en el Centro de tecnificación dejó huella y hasta algunos medios levantinos hablaban de lo sorprendente de la decisión del árbitro tinerfeño.

Desde el presidente a los afectados se rebelaron contra aquella injusticia, que pudo comprobar toda la LEB gracias a Youtube. "Nunca había visto algo así en la LEB" se quejaba el desesperanzado alero Álex Alba. "Aunque Alicante no lo reconozca, nosotros sabemos que ya les batimos", advertía Moncho Fernández. El presidente, Juan España, recalcaba que a lo largo los cuarenta minutos se produjeron "un montón de irregularidades" y que no se refería sólo a la última acción "que ya fue sangrante".

El pasado seis de marzo Afonso Castillo ya regresó, en compañía de Juan Carlos Souto (Galicia) al Samuel Aguilar para dirigir el Villa-Burgos. Este diario entendió que su labor había pasado "desapercibida" y los visitantes les acusaron de no medir la altura de las canastas.