Pádel

Leo Cano: el futuro del pádel español tiene ADN linense

  • El jugador benjamín, campeón de Andalucía, acude esta semana al Nacional en Zaragoza

  • Marcas y representantes siguen a este alumno del CP San Felipe, considerado "un diamante" 

El joven jugador de pádel linense Leo Cano

El joven jugador de pádel linense Leo Cano / Erasmo Fenoy

El futuro más prometedor del pádel nacional tiene genes de La Línea. El benjamín Leo Cano ocupa el puesto número dos del ranking andaluz de su categoría y el cuatro del nacional. Esta semana afronta junto al jiennense Hugo Rodríguez el Campeonato de España de menores, que se celebra en Zaragoza hasta el próximo domingo y en el que toman parte las 32 mejores parejas del país. La dupla Cano-Rodríguez comparece como cabeza de serie número dos y lo hace con serias aspiraciones de pelear por el título de su categoría.

Leo Cano Gómez no nació con una raqueta de pádel en las manos. Pero casi. Empezó a practicar este deporte con cuatro años. Con solo seis -ahora tiene diez- ya participaba en competiciones federadas de ámbito territorial. En este periodo ha llegado a ocupar el número uno del escalafón tanto autonómico como nacional y el pasado mes de junio se proclamó campeón andaluz en una competición que se desarrolló en El Cerrado del Águila, en Mijas. En ese caso junto al malagueño Cristian Guerrero.

La relevancia que ha alcanzado en el último año el jugador de pádel linense es tal que incluso hay marcas que ya se interesan por vincularse a su nombre y representantes de deportistas que le tiene incluido en su nómina de futuribles.

El joven deportista linense, que el pasado fin de semana se proclamó junto a su actual compañero subcampeón en Málaga del Torneo internacional de menores FIP Promises, es alumno del colegio San Felipe y a la vuelta de la competición comenzará su andadura en el quinto curso de Primaria. La raqueta no le distrae lo más mínimo de sus obligaciones escolares y ahí están sus calificaciones para dar fe de ello.

El camino hasta el Nacional que se avecina, sin duda la cita más importante del calendario, no ha sido ni menos fácil. Más bien todo lo contrario. Ni siquiera las limitaciones que impuso al crisis sanitaria generada por el coronavirus impidieron que Leo Caro juega en diversos puntos de la comunidad autónoma, además de en Ciudad Real, Salamanca o Valladolid, dicho sea de paso sin más ayuda económica que la que se puede brindar la propia familia.

De momento Leo Cano, que se entrena en el Linense Tenis Club bajo la batuta de Daniel Camacho, no deja de ser un diamante por pulir. Pero de lo que nadie en el mundo del pádel parece tener dudas es precisamente de eso, de que se trata de un diamante.

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