El Algeciras CF se reencuentra el próximo domingo con el FC Cartagena (18:00 en Cartagonova, en directo por Footters) en un partido que evoca muchísimos recuerdos. Este duelo clásico, con inolvidables batallas y protagonistas, con ascensos y descensos por el camino, termina siempre por unir a las dos aficiones en torno a una figura cuya sombra es enorme: Gabriel Navarro Baby.

"Una historia que nos une". Así titula el Algeciras CF -en un gesto hábil de su directiva- el cartel que este miércoles lanzó para promocionar el partido con una imagen del eterno exjugador y entrenador, que no hace mucho recibió un emotivo homenaje en el Nuevo Mirador de parte de los veteranos albirrojos y de la Balona, la otra entidad en la que el algecireño dejó una marca indeleble.

Pocas personas han logrado en su trayectoria deportiva lo que Baby consiguió con el Cartagena y el Algeciras, unos éxitos que después ampliaría en La Línea. Pocas personas han marcado tanto a tantos deportistas durante tanto tiempo. Por eso Baby sembró una simpatía que se mantiene inalterable y que en medio de una histórica rivalidad acerca a dos hinchadas muy temperamentales.

Baby (d), junto a Balaguer.

El algecireño Gabriel Navarro Baby tiene "sensaciones especiales" siempre que rememora sus años en Cartagena. En la ciudad departamental completó una de las partes más importantes de su carrera deportiva, por no decir la que más, ya que durante siete años jugó en el Cartagena (primero bajo la denominación de Club Deportivo y más tarde como Fútbol Club) y, sin paréntesis, pasó a desempeñar en ese mismo club las funciones de entrenador.

Baby aterrizó en Cartagena en la temporada 1971-72 procedente del Atlético de Madrid, donde una inoportuna lesión truncó su camino. El preparador logró dos ascensos y el Campeonato de España de Aficionados. Muy pronto se apoderó del dorsal número ocho de un equipo que entonces militaba en la Tercera división (equivalente a la actual Segunda B) y poco más tarde del brazalete de capitán y acabó por meterse al público en el bolsillo. Después de siete años a las órdenes, entre otros, de José Víctor, Baby pasó a formar parte del cuadro técnico y en sus más de cuatro años en ese banquillo consiguió dos ascensos (de Preferente a Tercera y de ésta a la entonces recién creada Segunda B) y estuvo a punto de dar el salto a la Segunda división A, pero lo evitaron, por un estrecho margen de puntos, Mallorca y Córdoba. Con todo, lo que más se recuerda es el título de campeón de España de Aficionados, muy valorado por la afición cartagenera.

"Allí me trataron de maravilla, con muchísimo cariño y siempre lo recuerdo con nostalgia", manifestó Baby en una entrevista a Europa Sur de hace ya casi una década, justo antes de visitar Cartagonova como técnico de la Balona. "Entiendo que fue la época más bonita de toda mi vida. Un ascenso es importante, pero un título... se gana pocas veces", confesó.

El cara o cruz de 1984

Baby vivió ya como algecirista uno de los duelos más recordados entre el Algeciras y el Cartagena. Ocurrió el 13 de mayo de 1984 en el desaparecido viejo Mirador, que ya se caía a pedazos por la Tribuna. Aquella penúltima jornada ambos equipos se jugaron la permanencia en Segunda en una final en toda regla. Los murcianos se impusieron por 0-2. En aquel Cartegana estaban Biri, que fue expulsado, y el también exalgecirista Trasante, quien siempre desempolva aquel día como "la alegría más grande" que experimentó como futbolista blanquinegro.