La Unión puede con todo

La Unión Deportiva Los Barrios logró ayer una victoria de las que valen más de tres puntos. El conjunto barreño tuvo frente al Racing Portuense más enemigos de los habituales en un partido. Además del once contrario y su gente en la grada, tuvo el peso de una semana difícil con salida aparatosa de entrenador incluida, y un árbitro muy desfavorable que dejó con ocho jugadores a los de Los Barrios en un encuentro para nada violento. Frente a esto tocaba tirar de épica y de casta pero siempre con orden, siempre con orden.

Una ocasión de Juanjo tras un buen servicio de Diego Romero en el minuto uno y otra ocasión de Marc Masip, que estrelló el balón en el cuerpo del meta Ismael en el minuto dos, cortaron la cinta al encuentro. La primera parte se cerró como había empezado: con una ocasión muy clara para la Unión. Rafa Bado tiró desviado.

En mitad de estas ocasiones, que abrieron y cerraron la primera mitad, mucho fútbol vertical. El Portuense se encontró en frente a una Unión que llegó al Puerto con hambre de tres puntos. Siempre en vertical buscando la velocidad de Juampe y la altura de Masip. Los de casa hicieron daño por la banda de Juan Ríos -fue de menos a más- que estuvo en el inicio excesivamente confiado.

De una falta clara en el borde el área del Racing no señalada llegó una contra bien montada por los locales. Villalustre consiguió romper el fuera de juego y con espacio se plantó ante Camacho -el meta estuvo casi perfecto en el partido- que paró bien el tiro abajo y el balón salió a córner. En el mismo, nuevo despiste de la defensa que dejó solo a Abel que no conectó una bolea que pudo ser letal. Minuto 11, las mejores ocasiones visitantes.

Tras minutos de depresión en cuanto a emoción llegó el gol de los gualdiverdes. Un saque de banda para el Portuense en el centro del campo lo cortó de cabeza Diego Romero -hizo muy bien trabajo de destruir pero también elaboró lo que tuvo que hacer Marcos y no hizo- y el balón quedó para Juampe que se midió a Mere en carrera. En eso es difícilmente superable el tarifeño, que con el balón botando batió por alto a Ismael.

El Portuense, indolente con el gol en contra, atacó a trompicones, sin mucho movimiento arriba excepto el de Villalustre, el mejor de los de casa.

Cuando aún no se habían terminado de sentar los aficionados tras el descanso llegó la primera ocasión del Portuense. Falló Villalustre, más activo que acertado. Los de Francisco Javier Manzano salió con intención de empatar y lo hicieron en el minuto seis del segundo tiempo de penalti, transformado por Lolo Guerrero. Espínola se tuvo que marchar a la caseta por su entrada a Alberto, que se coló con calidad en el área. Sería el primero de tres expulsados.

Después del empate ni el Portuense supo rematar a una Unión con uno menos, ni los barreños se dejaron pisar. Incluso poco a poco el conjunto entrenado ayer por Juan Carlos González Galindo supo reintegrarse y hasta volver a marcar. Rafa Bado centró al corazón del área un córner y Juanjo entró con todo, ganó el salto a los defensas, y batió por centro y por alto al meta. La Unión le cortó así las cortas alas a los del Puerto, e incluso, jugó mejor por momentos.

En el 68' se produjo la segunda expulsión. Juan Ríos se dispuso a salir del campo para dejar su puesto a Dani Guerrero cuando el colegiado en un ataque de rigurosidad entendió que estaba perdiendo tiempo y le mostró la segunda amarilla.

Otra vez tuvo que recomponer sus fichas el entrenador de los barreños y, de nuevo, volvió a mostrarse ordenado ante un Portuense nada convincente en ataque que sólo lo intentó con balones aéreos y jugadas pocos o nada elaboradas. Las entradas al campo de Carlos y Dani Guerrero sirvieron para hacerse más fuerte atrás. Arriba sólo quedó Juampe que, además del gol, hizo hasta al final un trabajo colosal.

A partir del último cuarto de hora el esfuerzo de Los Barrios se tuvo que duplicar al estar con dos menos y triplicar cuando el árbitro expulsó de roja directa a Dani Guerrero, supuestamente por insultar al asistente de banda.

Ni aún con ocho jugadores el Portuense supo hincarle el diente a la Unión. Los siete jugadores de campo de la Unión se distribuyeron a la perfección logrando taponar bien las entradas por las bandas y defender con claridad los constantes balones aéreos.

Tan grande fue el esfuerzo y el trabajo de Los Barrios y tan merecido el triunfo que la parroquia local olvidó de pitar a su equipo para aplaudir a los héroes gualdiverdes.