Horry, el Señor de los Anillos

Robert Horry es un extraño elemento, como lo apodaba el televisivo Andrés Montes. Tiene 46 años y presenta el mismo aspecto de cuando contaba con 20. Se crió en una ciudad de Alabama llamada Andalusia, pero jamás había oído hablar de la comunidad autónoma andaluza.Su pareja sentimental es española, aunque no conoce ninguna palabra del idioma de Cervantes. Sin embargo, lo más sorprendente es que Horry, a pesar de no jugar ni un solo All Star, cuenta con siete anillos de la NBA, siendo el jugador que más títulos de campeón atesoran, sin contar a los jugadores de los Boston Celtics que regaron de éxitos para el equipo verde la década de los sesenta.

No era la primera vez que Robert Horry estaba en España. Con anteriordad había visitado Barcelona, en dos oportunidades, y Madrid, en una. En cambio, nunca antes había pisado Málaga ni Andalucía. Por ello, al ser preguntado por la ciudad, en el 'BBVA Day' celebrado en la Capital de la Costa del Sol, fue completamente sincero: "No sabía nada. Pero tenía muchas ganas de llegar para conocerla", señaló el jugador de Alabama.

Estaba ansioso por conocerla por una sencilla razón: la similitud lingüística que guarda su lugar de origen (Andalusia, Alabama) con la comunmidad autónoma en la que se concentra Málaga. "La primera vez que oí hablar de la región en televisión, además de ver cómo era, estaba emocionado. Por eso estoy muy contento de estar aquí", apunta el exjugador de la NBA.

Sin embargo, esta no es la única curiosidad que engloba la trayectoria vital de Horry. En una caja fuerte reserva siete anillos de campeón de la NBA. Más que históricos como Jordan o Kareem Abdul-Jabbar, que tan solo han saboreado las mieles del éxito en seis ocasiones. "Es extraño. En un primer momento, el sueño es llegar a la NBA. Pero cuando estás ahí y ganas, quieres más. Quieres el segundo, el tercero y así sucesivamente", afirma el ala pívot. También desliza, a lo largo del BBVA Day, que tan importante como ganar el reconocimiento de los amigos y familiares cercanos, aunque nada como ver el orgullo en sus hijos: "Me emociona que mis hjios puedan decir que su padre hizo algo". Y todos ellos sin jugar ni un solo partido de las estrellas. Siendo un jugador de rotación. Un mero especialista desde el perímetro, eso sí, con la incalculable habiliad de encontrar la canasta en los momentos más tensos del partido. "El secreto está en creer en ti mismo. No se debe pensar. Simplemente se debe jugar. Solo hazlo".

Esos siete anillos, los fue ajustando a sus largos dedos en su paso por tres equipos distintos. Horry comenzó su carrera NBA en Houston Rockets, donde anotó su mejor clutch shot (tiro en el úlitmo segundo). "Había jugado mal en ataque (0/9 en tiros hasta ese momento). Pero la decisiva, tras pase de Olajuwon, la anoté" asegura con una sonrisa.

Más tarde, tras ser traspasado a Phoenix Suns, recaló en las disciplinas deportivas de Los Ángeles Lakers y de los San Antonio Spurs. De todos ellos guarda un fausto recuerdo, pero, a la hora de elegir, recuerda con especial cariño a Lakers de Phil Jackson. "En ese equipo pude compartir vestuario con la mejor época deportiva de Kobe Bryant, que califica como un competir voraz hasta en los entrenamientos, y de Shaquille O'Neal. Fue impresionante. Además, logramos la mejor actuación en un Playoffs (solo perdieron un partido)", señala Robert Horry.

Profundo conocedor de la NBA, actualmente se dedica a ser analista en las retransmisiones norteamericanas, el de Alabama alaba la figura de Pau Gasol y su reciente fichaje por los Spurs: "Soy un gran fan de Pau. Es un gran jugador y una gran persona. Es capaz de hacer crecer al conjunto. Con él, San Antonio va a tener un gran equipo".

No hay duda de que el de Sant Boi es un referente dentro de la NBA. No obstante, dentro de la cuota europea que engloba la mejor liga del mundo, no es,para Horry, el que mejor juego desarrolla en la actualidad. "El mejor es Giannis Antetokounmpo. El segundo mejor es Marc, del que espero que se recupere bien dela lesión que sufre. Y, luego, está Pau", clasifica. Los europeos cada vez llaman con mayor fuerza a la puerta, pero, de forma sorprendente, la brecha que separa a las selecciones nacionales del Viejo Continente con la de Estados Unidos cada vez es más abultada. A esta historia de programas de misterio, Horry tampoco encuentra causa: "No sé el porqué. Quizás sea porque a los estadounidenses les ha dado miedo de que los alcancen. O porque, simplemente, son mejores", añade el jugador con más triples acumulados en la historia de Las Finales de la NBA.

Al ser cuestionado sobre los posibles regresos de veteranos, como el ejemplo de Ray Allen, Horry, entre risas, dejó claro que su estado de forma sigue siendo impecable: "Puedo hacer 30 minutos de entrenamiento duro. Sigo jugando al baloncesto porque me encanta comer." En Málaga hay buen tiempo y buena comida. Quién sabe. Puede que algún día Horry se vista de corto para volver a la actividad con el Unicaja. Al fin y al cabo, es un extraño elemento.