El Wolverhampton, de la Premier League, ha derrotado este miércoles (3-4) al Cádiz CF, de la Primera dvisión, en encuentro amistoso disputado en el Municipal de La Línea. A pesar de que el choque había sido anunciado a puerta cerrada, un grupo de hinchas acudió al recinto con intención de presenciarlo, algo que no le fue permitido.
La crónica de este amistoso, con la firma de Jesús Jaques para Diario de Cádiz, periódico, como Europa Sur, del grupo Joly, dice así:
El Cádiz CF saldó el tercer amistoso de la segunda pretemporada con una derrota (3-4) frente al Wolverhampton en el envite amistoso disputado el miércoles 14 de diciembre en el Municipal de La Línea de la Concepción.
El conjunto amarillo, ataviado con la segunda equipación (azul) se vio superado por el colista de la Liga inglesa en un mal día en defensa (incluidos un par de goles en propia puerta) que no consiguió arreglar en ataque pese a tres goles que en circunstancias normales deben ser suficientes para ganar. Generó pocas ocasiones pero acertó, eso sí, siempre a remolque en el marcador.
Los amistosos son para hacer pruebas y corregir errores. La derrota puede tener el lado positivo de la necesidad de apretar más para mejorar con la vista puesta en el 30 de diciembre.
Los gaditanos entraron tan dormidos al rectángulo de juego que en el primer minuto se encontraron el 0-1 después de una plácida internada por la izquierda de Ait-Nouri, cuyo centro al interior del área lo remató a Carlos García de manera involuntaria en su propia portería. El canterano, que había marcado ante el Manchester United, tuvo la mala fortuna de convertir un despeje con la bota derecha en un autogol en la primera acción del choque, sin apenas tiempo para el tanteo entre contrincantes.
Sergio González recurrió de inicio al habitual 4-4-2 frente a un rival ubicado con un 5-4-1 transformado en ataque en un 3-5-2. Los ingleses, tras una salida fulgurante y con el madrugador gol a su favor, no tuvieron reparos en echarse atrás y cedieron la iniciativa a un Cádiz CF que no tardó en restablecer el equilibrio en el marcador.
El empate a uno llegó pronto en una acción casi calcada al gol inicial. En el 9, centro de Pacha Espino al área desde el costado izquierdo y remate del zaguero Toti, en su caso de cabeza, que acabó con el balón en el interior de su propia portería. 1-1.
Tras el accidental intercambio de regalos en forma de goles, los 'lobos' salieron de la cueva una vez perdida la renta. El partido se abrió con dominio alterno, sin un dueño claro y con dificultades de ambos conjuntos para llegar con claridad al área. Pero se acabaron imponiendo los foráneos, con más ímpeto y más madera en labores ofensivas frente a la ceguera de su oponente.
El asedio de los jugadores de Julen Lopetegui se acrecentó con el paso de los minutos con un Cádiz CF carente de ritmo y por momentos atrincherado en su parcela, sin ideas con el balón y con sensación de inseguridad en su desempeño defensivo.
Sin hacer nada del otro mundo, el cuadro británico se colocó de nuevo por delante en el marcador. Fue en el 31 en una segunda jugada tras un saque de esquina. Moutinho puso un centro con rosca dentro del área y Collins se impuso a todos en el salto para conectar un testarazo con el que batió a David Gil. 1-2
Los de Sergio González desprendieron señales de fragilidad que aprovechó el equipo inglés para agrandar aún más la distancia. En el 37, Podence controló sin oposición en una zona caliente como es la frontal del área y soltó un derechazo raso con el que coló el cuero por una esquina de la portería. Demasiado fácil, sin nadie que le encimara. Como consecuencia, la dura realidad del 1-3.
La efectividad de los ingleses contrastó con las escasas ocasiones sin tino de los gaditanos. En el 43 tuvo una clarísima Álvaro Negredo con una espectacular volea frente a la portería (tras un preciso centro de Antonio Blanco) con la que estrelló el esférico en el larguero.
El Cádiz CF estaba abocado a dar un paso al frente en la reanudación, pero sucedió todo lo contrario. Fueron los ingleses los que apretaron de lo lindo, muy superiores en el centro del campo, veloces en ataque, con la sensación de poder hacer más goles.
Cuando peor parecía ponerse el partido para los andaluces, Rubén Alcaraz acortó distancia en el minuto 56 con un zurdazo raso colocado junto a un poste después de un robó de balón de Brian Ocampo tras un error de bulto de los visitantes en la salida de balón. El uruguayo sirvió a su compañero, que dio en la diana desde el balcón del área para poner el 2-3.
La presión alta dio resultado. El segundo tanto tuvo un efecto revitalizante para los de Sergio González, empeñados en la misión del empate con media hora por delante y numerosos cambios en sus filas. En el 67, un disparo con rosca de Iván Alejo se escapó cerca de un poste.
No lo tuvo fácil un Cádiz CF enredado en un quiero y no puedo, sin terminar de hacer daño a un rival acomodado en su terreno con salidas a la contra. En el 76, Hee-chan Hwang aprovechó el agujero de los gaditanos para fabricar el 2-4. Se marchó por velocidad, sirvió al corazón del área y el canterano Genar despejó al interior de su portería al intentar evitar el remate de Raúl Jiménez. Segundo autogol y partido sentenciado.
La presión arriba de los cadistas no dio para mucho. La cadena de imprecisiones no permitió generar peligro peligro más allá del gol que firmó Álex Fernández en el minuto 89 con un tiro suave con la derecha que entró en la portería junto a un poste. Un tanto de bella el que puso el 3-4 y que sólo sirvió para maquillar el resultado.
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