Desmantelada una red de clínicas estéticas que usaban sustancias ilegales importadas de Corea
La operación conjunta entre el Servicio de Vigilancia Aduanera y la Guardia Civil revela un entramado criminal que suministraba toxina botulínica y otros productos sin control sanitario a centros clandestinos
Algeciras/El Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, en colaboración con la Guardia Civil, ha desarticulado una organización criminal que operaba en el ámbito de la medicina estética, distribuyendo sustancias ilegales procedentes de Corea. La operación, denominada Botul/Kalopsia, ha resultado en la detención de cuatro personas y la investigación de otras 41 por delitos contra la salud pública, estafa, intrusismo profesional y pertenencia a organización criminal.
La red criminal tenía su base de operaciones en provincias como Alicante, Málaga, Madrid, Cádiz, Murcia, Córdoba y Sevilla. Según informaron las autoridades, los implicados importaban toxina botulínica, hialuronidasa, ácido hialurónico y lidocaína sin pasar los controles de calidad y seguridad requeridos en España y Europa. Estas sustancias se distribuían a clínicas estéticas tanto legales como clandestinas y a individuos sin titulación oficial que realizaban tratamientos estéticos publicitados incluso en redes sociales.
La investigación, iniciada en 2023 por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, se activó tras detectar anuncios en redes sociales que ofrecían tratamientos estéticos por personas no cualificadas. Paralelamente, la Unidad de Análisis de Riesgo de la Aduana de Sevilla interceptó envíos ilegales procedentes de Corea, camuflados con falsas declaraciones de contenido, dirigidos a centros y particulares relacionados con la medicina estética.
Durante la fase de explotación de la operación, se efectuaron registros en San Pedro de Alcántara (Málaga), Torrevieja (Alicante) y Cartagena (Murcia). También se inspeccionaron 24 clínicas y establecimientos clandestinos en diversas provincias, incautándose 700 viales de toxina botulínica, 275 de hialuronidasa, más de 200 envases de lidocaína y millares de jeringuillas precargadas de ácido hialurónico, además de hilos tensores y maquinaria para tratamientos de plasma rico en plaquetas.
La operación ha contado con la colaboración de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, la Inspección de Farmacia de Andalucía y Madrid, la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), así como universidades y entidades privadas que brindaron apoyo técnico y realizaron análisis de las sustancias incautadas.
Las autoridades advierten sobre los riesgos para la salud derivados del uso de estos productos ilegales, cuya trazabilidad y calidad no están garantizadas. Además, se están recabando denuncias de afectados que han sufrido graves secuelas tras recibir estos tratamientos en centros clandestinos o a manos de personal sin cualificación.