Recuperada la normalidad tras el caos ferroviario: Renfe confirma que la circulación entre Algeciras y Madrid vuelve a funcionar

Una relativa normalidad —con los retrasos habituales— ha regresado este lunes a la línea ferroviaria que une el Campo de Gibraltar con Madrid después de un domingo marcado por el caos, las demoras interminables y la desinformación. Según ha confirmado Renfe a Europa Sur, los trenes que conectan Algeciras con la capital de España, a través de la línea de alta velocidad desde Córdoba, circulan desde las 9:30 con regularidad, tras solucionarse los problemas provocados por un robo masivo de cable que afectó a la red a su paso por la provincia de Toledo.

El sabotaje, que se produjo en cinco puntos distintos de los municipios de Los Yébenes y Manzaneque, interrumpió el servicio durante horas y dejó a más de 10.700 viajeros de Renfe y AVE atrapados en vagones o bloqueados en estaciones sin información clara sobre su destino como colofón del puente del 1 de mayo. Entre ellos, los pasajeros del tren Alvia que salió desde Algeciras el domingo a las 15:52 y que no llegó a Madrid hasta las 3:30 de la madrugada del lunes, tras una odisea de casi doce horas.

"La cafetería del tren está totalmente vacía y ni siquiera hay papel higiénico en los baños", contaba durante la noche del domingo una viajera del Alvia entre Algeciras y Madrid, atrapada en mitad de la comarca de La Sagra

"La cafetería del tren está totalmente vacía y ni siquiera hay papel higiénico en los baños", contaba durante la noche del domingo una viajera del Alvia entre Algeciras y Madrid, atrapada en mitad de la comarca de La Sagra. “Una auténtica pesadilla”, relataban varios usuarios en redes sociales, donde las quejas por la falta de comunicación y de soluciones alternativas fueron constantes a lo largo del día. Muchos denunciaban la ausencia de personal de Renfe en estaciones intermedias y la imposibilidad de reembolsar los billetes o planificar alternativas ante el silencio de la compañía.

Dos incidentes, un caos generalizado

En medio de las críticas, el presidente de Renfe, Álvaro Fernández de Heredia, salió al paso en la madrugada del lunes para explicar que la paralización total no fue provocada únicamente por el robo de cable, sino por un segundo incidente que agravó la situación: un tren de la operadora Iryo sufrió un “enganchón” que arrastró la catenaria, es decir, el sistema eléctrico que alimenta a los trenes. La reparación de esta avería dejó inoperativa por completo la línea de alta velocidad durante horas, mientras los trenes afectados esperaban una solución.

“El robo de cable permitía la circulación con limitación de velocidad y con previsión de retrasos de hasta 60 minutos”, explicó Fernández de Heredia en la red social X (antes Twitter). “Cuando todos los trenes ya circulaban, se produjo el enganchón del Iryo, y eso es lo que provocó la parada completa”.

Una versión que no ha aplacado las críticas. La consejera de Fomento de la Junta de Andalucía, Rocío Díaz, ha exigido al Gobierno central que dé explicaciones sobre lo ocurrido, denuncie los hechos con contundencia y, sobre todo, tome medidas para evitar que una situación así vuelva a repetirse. “Los retrasos, averías e incidencias en el servicio ferroviario son, desgraciadamente, una constante. Pero lo de este domingo ha sido especialmente grave por la falta de atención a los viajeros atrapados durante horas sin información ni alternativas”, ha declarado este lunes.

Recuperación progresiva y reubicación de viajeros

Según la última actualización de Renfe a las 13:30, la operativa ferroviaria está plenamente restablecida. La circulación entre Madrid y Toledo se reanudó a las 9:00 y a las 9:40 salió el primer tren especial a Málaga desde Atocha. Más del 70% del servicio ya ha sido recuperado y se espera que la normalidad total llegue entre las 14:00 y las 16:00 de este lunes.

Renfe ha reubicado a los viajeros afectados y ha programado trenes de doble composición —con dos ramas unidas— para reforzar la oferta. La compañía y Adif aseguran haber trabajado en condiciones muy complejas para resolver la incidencia y garantizar la operativa lo antes posible.

Mientras tanto, Adif y la Guardia Civil han iniciado una investigación para identificar a los autores del sabotaje. Patrullas de seguridad trabajan desde el domingo en los puntos donde se sustrajo el cable, una acción que las diligencias califican como “coordinada y deliberada”. El propio ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, calificó el suceso como “muy grave”.

Los daños se localizaron en cinco puntos distintos a lo largo de un radio de 10 kilómetros en los términos municipales de Los Yébenes y Manzaneque, con cortes identificados en los puntos kilométricos 102+200, 101+400, 99+750, 92+800 y 93+600. El robo ha afectado tanto a la comodidad de los viajeros como a los costes operativos de las compañías ferroviarias.

Adif estima que se sustrajeron unos 150 metros de cableado, con un valor de apenas 300 euros en el mercado, aunque su importancia técnica era vital: entre ellos, cables de seguridad que permiten detectar la presencia de trenes en la vía. Su ausencia dejó "a ciegas" al sistema de control ferroviario, obligando a limitar la velocidad a 40 km/h y suspendiendo por completo la circulación hasta restituir las condiciones de seguridad.

Los servicios jurídicos de Adif ya están redactando la denuncia correspondiente por la sustracción, en lo que consideran un ataque directo a una infraestructura crítica. El robo del cable, además de tener escaso valor económico, revela una posible intención deliberada de provocar el colapso de la línea.

Una línea vital para el Campo de Gibraltar

El restablecimiento del servicio supone un alivio para los usuarios del Campo de Gibraltar, que ya han sufrido numerosas interrupciones durante los últimos años, tanto por obras en la línea entre Algeciras y Bobadilla como por restricciones operativas derivadas de fallos técnicos. La conexión ferroviaria con Madrid, que combina tramos de vía convencional con alta velocidad a partir de Córdoba, es una infraestructura clave para los viajeros y el tejido empresarial de la comarca.

Aunque Renfe ha asegurado que todos los trenes previstos para este lunes circulan con normalidad, muchos usuarios siguen reclamando compensaciones por los perjuicios sufridos. Algunos, como los viajeros procedentes de Algeciras, estuvieron horas detenidos en mitad del trayecto, en la comarca de La Sagra (Toledo), sin acceso a servicios básicos ni información sobre cuánto tiempo iban a tardar en llegar a la capital.