Más de 600 miembros de profesiones consideradas de riesgo ante esta enfermedad se han contagiado por el virus en la provincia desde el inicio de la pandemia. Según datos aportados por la Junta de Andalucía, son ya 639, entre personal sanitario que trabaja en centros médicos o en centros sociosanitarios, personal no sanitario que trabaja en estos servicios, personal de farmacias y miembros de las fuerzas de seguridad, tanto estatales como locales.

De este número hay que lamentar cuatro fallecimientos. La incidencia, en todo caso, parece que ha disminuido de forma notable en las últimas semanas pues se han declarado 30 contagiados en los últimos catorce días, y 11 en la última semana.

Como es previsible, el colectivo con un mayor número de contagios es el del personal sanitario, médicos y enfermería, que realizan su labor en los centros sanitarios. Son en total 407. En los últimos catorce días son los que más han sufrido esta enfermedad, 21 de los 30 casos.

Hay 87 casos confirmados en personal sanitario que trabaja en centros sociosanitarios, y otros 7 en equipamientos diversos.

En cuando a personal no sanitario pero que trabaja en hospitales y en atención primaria, se han dado desde el inicio de la pandemia 51 casos, junto a 32 más en centros sociosanitarios.

En los equipos de atención han público se han constatado 14 afectados.

En cuanto a las Fuerzas Armadas, que en los picos de la pandemia han realizado una intensa labor de control y limpieza sanitaria en numerosos puntos de la provincia, y los distintos cuerpos de la Policía Nacional, Autonómica y Local se han visto afectados 23 miembros.

El estudio de la Junta incluye también como contagiados a 8 trabajadores de ayuda a domicilio, 4 del sector de las farmacias y 16 de otras profesiones no específicadas.