Movistar arregla cerca de La Almoraima la avería que dejó sin internet ni teléfono a Jimena y Castellar más de 36 horas
Una rotura en el cable principal de fibra óptica en las inmediaciones de la finca causó un apagón digital en ambos municipios del Campo de Gibraltar
Jimena y Castellar, incomunicados por una avería de Movistar que deja sin Internet, teléfono ni fibra a miles de vecinos

Castellar de la Frontera/Jimena y Castellar de la Frontera, dos municipios rurales del interior del Campo de Gibraltar separados por 25 kilómetros, han sufrido un apagón digital masivo de más de 36 horas por la rotura del cable principal de fibra óptica de la zona y que, finalmente, sobre las 15:30 de este martes, ha sido reparado por Movistar. Desde la madrugada del lunes, 9 de junio —alrededor de las 4:00—, los servicios de internet, teléfono fijo, móvil y fibra óptica estuvieron completamente interrumpidos en ambas localidades, dejando sin conexión a miles de vecinos, empresas, centros educativos, administrativos y sanitarios.
La causa del corte se localizó en las inmediaciones de la finca La Almoraima, en el término municipal de Castellar, según fuentes consultadas por este periódico, concretamente cerca de la fábrica de corcho. La avería provocó la caída simultánea de todos los operadores que dependían de dicha infraestructura.
La avería no es achacable directamente a la operadora: el corte fue detectado en la noche del lunes a las 21:53, cuando sus técnicos pudieron localizar el punto exacto del corte
El punto del corte fue detectado en la noche del lunes a las 21:53, cuando los técnicos pudieron localizar el lugar exacto de la avería. Sin embargo, no fue posible intervenir hasta la mañana del martes, cuando se iniciaron los trabajos para reparar la fibra. A las 14:30, los operarios lograron restablecer el servicio de forma paulatina, consiguiendo restablecerlo de forma completa a las 15:30.
Desde Movistar aclaran que la incidencia no es atribuible a la operadora, sino que probablemente está relacionada con algún trabajo realizado en la zona que causó el corte accidentalmente. Varias fuentes consultadas por esta redacción indicaron que la avería se había producido en el interior de La Almoraima, aunque desde esta última se niega dicho extremo.
Impacto y quejas en Jimena y Castellar
La interrupción del servicio generó una grave situación en ambos municipios. Jimena de la Frontera, con cerca de 6.800 habitantes, y Castellar de la Frontera, donde residen unos 3.000 vecinos, han estado incomunicados en servicios tan básicos como la telefonía fija, móvil y el acceso a internet.
Francisco Gómez, alcalde de Jimena por Izquierda Unida, denunció la magnitud del problema: “La situación es escandalosa. Todo está parado: la Policía Local, los centros de salud, los bancos... No es la primera vez que sufrimos estos cortes, pero esta vez ha ido demasiado lejos. La ciudadanía tiene derecho a estar conectada”. Debido a la falta de servicio, el regidor tuvo que salir del municipio para poder realizar declaraciones telefónicas a este periódico.
Por su parte, Adrián Vaca, alcalde de Castellar (PSOE), calificó la situación de “vergonzosa”. “No tenemos conexión desde el lunes y Movistar no nos ofrece respuestas ni un canal directo de atención para los Ayuntamientos”, se lamentó. Destacó especialmente el impacto en el centro de salud local, donde la falta de acceso a los sistemas digitales impidió su correcto funcionamiento. Además, bancos, colegios, comercios y numerosas empresas también sufrieron las consecuencias, con trabajadores que se vieron obligados a desplazarse a bibliotecas públicas en municipios vecinos como San Roque o Los Barrios para poder teletrabajar.

Dependencia de un único proveedor y consecuencias
Tanto Jimena como Castellar dependen exclusivamente de Movistar para el acceso a la fibra óptica, lo que agrava la situación de vulnerabilidad ante averías de esta naturaleza. Esta dependencia deja a los vecinos sin alternativa alguna cuando se produce una interrupción en el servicio.
En una zona que se ha convertido en un destino habitual para el turismo rural y para nómadas digitales atraídos por la tranquilidad del entorno, la falta de conexión se traduce en una merma significativa de la calidad de vida y en un freno a la actividad económica local. “Esta crisis nos deja en una posición muy vulnerable. ¿Cómo vamos a atraer nuevos residentes si no podemos garantizar algo tan básico como la conexión a internet?”, se pregunta Francisco Gómez.
El Ayuntamiento de Jimena elevó quejas formales tanto a la Agencia Digital de Andalucía, dependiente de la Junta de Andalucía, como al Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, exigiendo el restablecimiento inmediato del servicio, explicaciones claras sobre el apagón y medidas que eviten que estas situaciones se repitan.
De igual modo, el Ayuntamiento de Castellar remitió reclamaciones formales a cinco entidades distintas de la Junta de Andalucía y el Gobierno de España, denunciando las constantes interrupciones en la telefonía e internet y reclamando soluciones urgentes.
En sus comunicados oficiales en redes sociales, ambos consistorios subrayaron la gravedad del problema y la necesidad de garantizar una red estable y fiable. “Internet no es un lujo, es una herramienta indispensable para la vida actual. Esto no puede volver a pasar”, subrayó Vaca.
También te puede interesar
Lo último