La investigación abierta por el Servicio de Asuntos Internos (SAI) de la Guardia Civil en torno al teniente coronel David Oliva Moreno gira en torno a la presencia de este en una fiesta organizada por un narcotraficante del Campo de Gibraltar, durante el periodo en el que era el jefe operativo Organismo de Coordinación del Narcotráfico (OCON) Sur de lucha contra el narcotráfico entre los años 2018 y 2022, y las presiones que habría realizado posteriormente a un subordinado para que le dijese si estaba siendo investigado a ese respecto.

Estas serán algunas de las cuestiones a las que Oliva, junto con uno o dos mandos más de la Benemérita -entre los que figura un teniente- deberán responder este miércoles en calidad de investigados ante la Audiencia Nacional.

Los delitos que se atribuyen indiciariamente a Oliva son los de cohecho y revelación de secretos. Este martes ya han declarado por videoconferencia en calidad de testigos ante el SAI varios mandos de la Benemérita.

Destinado en la actualidad en Málaga, Oliva fue entre los años 2018 y 2022 una figura clave contra las redes del narcotráfico que operan entre España y Marruecos en su calidad de máximo jefe operativo del Organismo de Coordinación del Narcotráfico (OCON) Sur, una unidad de élite formada por un centenar largo de agentes escogidos en comisión de servicios y especializados en la lucha contra el tráfico de drogas -hachís, cocaína y marihuana, fundamentalmente- y otras actividades delictivas asociadas a ese fenómeno, como el blanqueo de capitales, el crimen organizado y la corrupción.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el delegado del Gobierno para el Plan Nacional Sobre Drogas, Joan Ramón Villalbí, condecoraron a Oliva por sus servicios en 2021 con la Medalla al mérito del Plan Nacional sobre Drogas. Oliva fue teniente de la Benemérita hasta agosto de 2022, cuando fue ascendido a teniente coronel.