Los permisos especiales que Reino Unido y la Unión Europea proyectan poner en marcha en 2024 para atravesar sus fronteras después del Brexit no afectarán, al menos de momento, al paso fronterizo entre La Línea y Gibraltar. 

En lo que respecta al Peñón, Bruselas y Londres siguen centrados en la búsqueda de un tratado internacional -que las dos partes consideran en una fase decisiva- que prevé la supresión de la Verja e incluiría "disposiciones para hacer posible la movilidad de personas y de bienes asegurando la plena integridad del área Schengen y del mercado interior de la UE", según explicó el Gobierno español en una respuesta parlamentaria la pasada semana. 

Pero incluso si no se alcanzara un acuerdo, los nuevos requisitos que la Unión Europea y Reino Unido planean poner en marcha en sus fronteras estarían sujetos a posibles excepciones que permitirían que se agilizara el paso por la Aduana linense y gibraltareña, un objetivo que ambas partes consideran indispensable para asegurar la prosperidad de la zona tras el divorcio que culminó el 31 de enero de 2020. 

ETIAS

La Unión Europea (UE) está implementando un nuevo permiso de viaje llamado Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes, o ETIAS por sus siglas en inglés, que será obligatorio para aquellos ciudadanos de países que no requieren una visa para entrar en la zona Schengen, que abarca la mayoría de las naciones europeas.

No se sabe cuándo ETIAS, que ya ha sido aplazado varias veces, entrará en funcionamiento, aunque en los sitios webs oficiales del sistema afirman que entrará en vigencia en 2024. Ahí no aparecen ni Reino Unido ni Gibraltar como sujetos a la exigencia en la actualidad.  

En principio se deberá llenar un formulario online, al que el sistema dará respuesta en cuestión de minutos, para el 95% de los solicitantes. Los viajeros de la UE están exentos y tienen libertad de movimiento por el bloque, lo que les permite pasar todo el tiempo que quieran en muchos países. Los residentes de la UE también estarán exentos. Pero para todos los demás que ingresen al bloque desde un país que previamente no requería una visa, el ETIAS será obligatorio. La medida afecta a unos 60 países, incluidos Estados Unidos y el Reino Unido, que perdió la libertad de movimiento tras el Brexit. El valor o precio del trámite por persona es de 7 euros, para quienes tengan entre 18 y 70 años.

El objetivo del ETIAS es fortalecer la seguridad de la UE al recopilar información sobre los viajeros antes de su llegada a Europa. Esto permitirá a las autoridades detectar posibles amenazas y riesgos a la seguridad antes de que los viajeros ingresen a territorio europeo.

ETA

La Autorización Electrónica de Viaje (ETA, en inglés) será necesaria para turismo, visitas de negocios y estudiantes cuya estancia en Reino Unido vaya a ser menor de seis meses, en principio a partir de 2024.

Es formulario que se completará en unos minutos través de internet, algo que se puede hacer en cualquier momento hasta unos días antes de la salida del vuelo. Se requerirá un pasaporte biométrico nacional válido de un país elegible, determinar los motivos y otros detalles del viaje, una dirección de correo electrónico y una tarjeta de crédito o débito. El precio del trámite se desconoce aún. 

Una vez que la información sea enviada al Reino Unido, la solicitud normalmente se procesa y se da una respuesta dentro de las 48-72 horas. Por lo general, los visitantes podrán pasar 180 días (6 meses) en el Reino Unido y visitar cualquier parte del país.

La ETA es parte de los planes del Reino Unido para digitalizar completamente sus fronteras para 2025. Los titulares de ETA del Reino Unido simplemente tendrán que escanear el pasaporte que usaron para solicitar al llegar a la frontera. El permiso de entrada será verificado electrónicamente.

“El sistema dará al Reino Unido un mayor control de sus fronteras, lo que nos permitirá bloquear la entrada de amenazas en el país, al tiempo que ofrecerá a las personas y a los transportistas más garantías”, ha señalado el Ministerio del Interior británico, que calcula que se tramitarán cerca de 30 millones de solicitudes al año a través del sistema eTA.

Otros países del mundo ya cuentan con sistemas de este tipo, como Estados Unidos, que dispone del Sistema Electrónico de Autorización de Viaje (ESTA), así como Australia, Nueva Zelanda y Canadá.