La Mesa de la sequía del Campo de Gibraltar ha acordado una suspensión del suministro de agua mediante "bajada drástica" de la presión en la red en horario nocturno a partir de este miércoles, 10 de enero. En palabras de la presidenta de la Mancomunidad de Municipios, Susana Pérez Custodio, esto supondrá que algunas zonas recibirán "un hilillo de agua" mientras que en otras los cortes serán absolutos.

El director general de Arcgisa, José Manuel Alcántara, ha explicado este lunes que estas diferencias de deben a "razones técnicas" a causa, principalmente, de la orografía. Los municipios que se encuentran "en puntos bajos" -los más cercanos al mar- tendrán algo de agua "por los restos que quedan en la red", mientras que los situados en puntos altos, sufrirán una restricción total al abrir el grifo. También influirá la altura del piso de la vivienda.

Esta bajada drástica de presión en los hogares se producirá entre las 23:00 y las 6:00.

Otra de las "restricciones en el consumo de agua", tal y como ha expresado Pérez Custodio, consistirá en una reducción de presión en la red de abastecimiento, no tan acusada, en horario de diurno, es decir, en la franja de 6:00 a 23:00, una medida que se ha ido implantando de manera paulatina durante el otoño, "por lo que los hogares no lo acusarán tanto".

En cualquier caso, la presidenta de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar ha pedido a la ciudadanía "responsabilidad" y "colaboración", al mismo tiempo que ha recordado la prohibición de usar agua potable para el riego de zonas verdes y jardines, el llenado fuentes ornamentales y piscinas privadas, la limpieza de calles, mobiliario urbano o vehículos fuera de los establecimientos autorizados y el uso de duchas y surtidores públicos a causa de la falta excepcional de recursos hídricos.

"Emplear el agua para usos prohibidos puede tener graves consecuencias jurídicas en base a la legislación en vigor", ha advertido Pérez Custodio.

Todas estas medidas seguirán vigentes hasta que se supere el "umbral crítico" de los embalses, el cual marca la entrada en situación de emergencia por sequía, y que en el caso de los tres pantanos que abastecen a la comarca (Chaco Redondo, Guadarranque y Almodóvar) se sitúa en 41,5 hectómetros cúbicos.

El delegado de Servicios Mancomunados, Manuel Abellán, y el director general de Arcgisa, José Manuel Alcántara, este lunes.

Ahorro del 20% del consumo

Según ha declarado este lunes José Manuel Alcántara, acompañado por  el delegado de Servicios Mancomunados, Manuel Abellán, se ha cumplido "el peor de los escenarios previstos" cuando, el pasado mes de octubre, se reunió por última vez la Mesa de la sequía. Desde entonces, prácticamente no ha llovido en el Campo de Gibraltar, lo que ha obligado a adoptar estas restricciones que buscan un "ahorro inminente" del 20% del consumo de cara al comienzo del próximo año hidrológico. "Estaremos pendientes de lo que suceda de aquí a la primavera", ha añadido el director general de Arcgisa.

Alcántara también ha subrayado que la sequía actual es, sin duda, peor que la vivida entre 1992 y 1995, cuando la comarca campogibraltareña también sufrió restricciones de agua. "En aquella época, la situación duró tres años, mientras que el problema actual dura el doble", ha recordado el responsable de Arcgisa, quien ha añadido que, esta vez, se han podido retrasar las limitaciones del suministro a la población gracias a una mejor gestión del consumo de la agricultura y la industria.

La información de la Red Hidrosur refleja que los tres embalses que abastecen a las ocho poblaciones de la comarca almacenan este lunes un total de 39,89 hectómetros cúbicos de agua. Esta cantidad supone el 23,74% del aforo máximo conjunto de los tres pantanos (168 hm3) y que cada vez queda más lejos del mínimo de 41,5 hm³.

El embalse de Charco Redondo, en Los Barrios, en los últimos días de 2023.

Plan 'Sequía Plus'

De forma paralela, la Junta de Andalucía anunció la pasada semana que, antes del verano, instalará una toma flotante en el embalse de Guadarranque, en el entorno de Castellar de la Frontera, para extraer 27 hectómetros cúbicos (hm3) de agua que se encuentra a niveles bajos. Este dispositivo se utiliza para captar aguas superficiales en presas a través de una tubería de succión equipada con una válvula de fondo, la cual, a su vez, está conectada a una cabecera de toma.

Es una de las medidas dentro del plan 'Sequía Plus', además de sondeos en el río Guadiaro.