Bosques de gorgonias amenazados en el Parque Natural del Estrecho (y II)
Instituto de Estudios Campogibraltareños
Los trabajos realizados en la Isla de Tarifa se centran en buscar la forma de crear bosques reproductivamente eficientes y genéticamente diversos
Desarrollo de un método de restauración para E. singularis
En total, en la acción de restauración llevada a cabo hasta la fecha, se han recolectado 58 fragmentos donantes de los que se han obtenido 116 esquejes. Los esquejes se trasplantaron a los bloques de hormigón y fueron mantenidos en el acuario con éxito hasta su reintroducción en el medio marino. Se reintrodujeron en las zonas de restauración, 58 al este de la Isla de Tarifa en “San Andrés” (36° 0’ 6.306” N; 5° 36’ 25.155” E) y 58 al oeste de la isla de Tarifa en “Las Calderas” (36° 0’ 9.650” N; 5° 36’ 46.823” E).
A fecha de cierre del presente texto, otros 30 trasplantes se encuentran en los sistemas de acuario de BECA para ser devueltos al medio en estos mismos emplazamientos.
La introducción de los primeros trasplantes en las zonas de restauración se realizó en dos momentos (julio y octubre de 2021), para la primera introducción (56 trasplantes) se realizó un seguimiento inicial 3 meses después de su introducción y se localizó el 91% de los trasplantes, existiendo ya una buena cobertura de organismos sobre los bloques de hormigón usados como base. Dado la lenta tasa de crecimiento de E. singularis fue imposible detectar la posibilidad de crecimiento de los esquejes, pero sí pudimos evaluar el estado de afectación/conservación. Pudimos observar que los trasplantes localizados al oeste de la Isla de Tarifa, presentaron más afectación y más signos de necrosis que los del lado este. Concretamente el 57 % de los trasplantes situados al oeste de la Isla presentaban el 50 % o más de afectación por necrosis y R. oxamurae, habiendo algunos ejemplares afectados al 100 %. Mientras que, en el este, el porcentaje de trasplantes afectados y con menores perspectivas de viabilidad fue del 21 %.
Discusión
El número total de colonias observadas en los 10 transectos visuales realizados alrededor de la Isla de Tarifa fue de 99, un número mucho menor al que esperábamos según los registros hechos en anteriores buceos en la zona décadas atrás. La mayoría de las colonias detectadas son de talla pequeña y media, y las encontramos muy dispersas en el espacio. Eunicella singularis, la especie objetivo de esta acción, apenas supone un 5% de las colonias examinadas, no alcanzaban tallas donde mostrar sus características distintivas y su identificación tuvo que ser corroborada por la morfología de escleritos y presencia de zooxantelas.
Actualmente, en la comunidad de gorgonias de la Isla, dominan Eunicella labiata y E. gazella, suponiendo más del 75 % de los encuentros. Estas dos especies son de carácter cálido-tropical, con distribución desde Angola y que alcanzan la costa peninsular atlántica y mar de Alborán, E. gazella alcanzando el golfo de Vizcaya.
La presencia de gorgonias de pequeño tamaño nos da indicios de que sigue existiendo reclutamiento, pero les cuesta más prosperar en el tiempo. Además, un número elevado de las colonias de gorgonias detectadas (64,64 %) presenta afectación por algas filamentosas, especialmente por R. okamurae. Nos ha sorprendido la gran abundancia en la zona de esta alga invasora, originaria del océano Pacifico, que actualmente invade los fondos fotófilos de la zona del Estrecho, homogenizando el paisaje submarino y causando graves perjuicios locales.
En el caso de las gorgonias, el alga queda enganchada entre las ramas de la colonia, asfixiando a los pólipos e impidiendo que estos se puedan alimentar. También se ha detectado la presencia de líneas de pesca enredadas en las colonias, afectando directamente al tejido de las colonias que termina necrosando y exponiendo el eje córneo con el resultado del incremento de epibiontes. La regresión de las poblaciones de gorgonias en la Isla de Tarifa es una realidad y hay que seguir investigando para encontrar las medidas de conservación y restauración eficientes para ayudar a la recuperación de estas especies y de toda la comunidad.
El presente estudio pretende experimentar y evaluar la primera acción de restauración de gorgonias realizada en la zona de la Isla de Tarifa y en Andalucía. El método utilizado consiste en el trasplante de esquejes para aumentar el número de colonias en la zona. El éxito de este método de restauración está ampliamente corroborado en corales escleractinias y gorgonias de ambientes someros tropicales. Por el contrario, a las gorgonias tropicales, las gorgonias de ambientes temperados, como las del Mediterráneo, tienen unos ciclos de vida y tasas de crecimiento más lentos por lo que los resultados esperados solo se podrán asegurar a medio-largo plazo.
Algunos estudios previos han experimentado y realizado acciones de restauración exitosas con especies de gorgonias someras en el Mediterráneo. Actualmente, cerca de la zona de estudio, en Punta de la Mona, en Almuñécar-La Herradura se está realizando también una acción de restauración para recuperar las poblaciones de la especie de coral candelabro Dendrophyllia ramea. Uno de los principales desafíos para el éxito de la técnica de trasplantes de esquejes de gorgonias que se ha detectado en experiencias anteriores es conseguir que los esquejes se mantengan fijos en el sustrato y erguidos, asegurando así su viabilidad a largo plazo. Algunos citan pérdidas de trasplantes por mala sujeción resaltando que el paso de fijar los trasplantes es de gran importancia. Es por ello por lo que en este estudio este paso se realiza en condiciones controladas en acuario, para que la corriente o el efecto del oleaje que afecte al fondo no pueda hacer perder el esqueje antes de que la masilla endurezca.
En el presente estudio, mientras los esquejes están en el acuario, se les toma muestras para identificar el sexo y la genética del esqueje. Esto es crucial para la creación de bosques de gorgonias restaurados que sean reproductivamente eficientes y genéticamente diversos. Para el buen desarrollo y viabilidad de la población restaurada es necesario que la sex ratio entre hembras y machos esté equilibrada para favorecer la reproducción y reclutamiento de estas especies que ya de por sí presentan un reclutamiento limitado. Por otro lado, la diversidad genética de la nueva población restaurada favorecerá que esta sea mucho más resiliente a futuras amenazas y cambios en el ambiente.
Otro desafío de las acciones de restauración, que intentamos solventar en el presente estudio, es el seguimiento de los trasplantes a largo plazo. Identificar cada trasplante y seguirlo a largo plazo es clave para evaluar la eficacia de las técnicas de trasplantes y poder corregir lo que sea necesario. En este estudio, incorporamos una técnica innovadora para ello: el uso de microchips. Una vez los trasplantes estén en las
zonas de restauración y gracias a los microchips, incorporados en los bloques de hormigón de los trasplantes, podremos detectar con facilidad de qué esqueje se trata. Además, con el microchip podremos añadir información complementaria sobre el trasplante como, por ejemplo, cuándo fue introducido en la zona de restauración, si es hembra o macho o cuál es su genética. Esta innovadora técnica promete facilitar mucho la fase de seguimiento de las poblaciones restauradas.
Se ha hecho un seguimiento fotográfico, con la identificación de los trasplantes mediante una numeración de los bloques. Después de 3 meses desde la instalación de los primeros 56 trasplantes (28 en el este y 28 en el oeste de la Isla de Tarifa) realizamos un primer seguimiento de estos en el que ya podemos avanzar algunas conclusiones preliminares. En el oeste de la Isla el sustrato es más arenoso e inestable, por lo que, con las corrientes, abundantes en la zona, los trasplantes podrían presentar signos de abrasión a causa de los granos de arena y hojas sueltas de R. okamurae arrastrados por las corrientes. En el este, el sustrato es detrítico rocoso, más heterogéneo, con bloques medianos y grandes que resguardan a los trasplantes de las fuertes corrientes.
Estos resultados evidencian la influencia de las condiciones locales para la viabilidad de los bosques de gorgonias restaurados. Aun así, estos son resultados preliminares y debemos continuar con el aporte de nuevos trasplantes y seguimiento de los trasplantes ya emplazados. A partir de este seguimiento inicial y adaptándonos a los resultados que vamos observando, nos planteamos continuar ampliando con nuevos trasplantes solo la zona restaurada al este de la Isla y así optimizar recursos, ya que será en esta localidad donde podremos asegurar un mayor éxito de la acción de restauración.
Actividades de divulgación
Además de los trabajos de conservación, Gotares cuenta con un programa de divulgación científica para sensibilización sobre la necesidad de realizar acciones de restauración ecosistémica.
Conclusiones
En conclusión, podemos decir que la puesta en marcha de esta acción de restauración (con el uso innovador de microchips para reconocimiento, sexado y conservando muestras genéticas de las colonias donantes) y los primeros resultados aquí descritos, suponen un buen planteamiento inicial hacia la recuperación de la población de E. singularis en la Isla de Tarifa. A pesar de esto, es necesario vigilar la evolución de la invasión de R. okamurae y cómo afecta a la prosperidad de gorgonias y otros organismos en el bento.
Acciones como esta son de vital importancia para intentar revertir la tendencia actual de declive de las poblaciones de gorgonias someras y hay que seguir apostando por optimizar y mejorar las técnicas de restauración.
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