Araujo subraya que el trabajo tras el vertido de aceite ha sido escrupuloso

La delegada provincial de Medio Ambiente, Gemma Araujo, subrayó ayer la corrección con la que se ha actuado en todo momento desde la Consejería tras el accidente registrado en Puente Mayorga que provocó un vertido de aceite. Araujo ha subrayado la escrupulosidad con la que se ha trabajado en el ámbito de sus competencias que se refieren exclusivamente al control de la calidad ambiental del aire. En este sentido, ha aclarado que todos los aspectos relacionados con la evacuación, los planes de emergencia, así como la limpieza del vertido quedan fuera de los cometidos de la Consejería.

Los trabajos realizados por la Delegación Provincial se han centrado en determinar una posible alteración de la calidad ambiental del aire, qué tipo de sustancias se vertieron así como las condiciones en la que se produjo dicho vertido. Labor para la que se han puesto en marcha todos los mecanismos de los que dispone la Consejería desde el momento en que se le notificó el accidente a través del Servicio de Emergencias 112.

Las investigaciones realizadas hasta el momento evidencian que tanto por la cantidad vertida, como por el carácter puntual de la misma y las características del producto (Textran TDH Premium), el accidente no ha supuesto afección para la población por alteración del aire respirable. Respecto a la ficha de seguridad, la delegada ha subrayado que se trata de un documento que posee todo producto que se encuentra en el mercado y que es de libre acceso, por lo que esta delegación no ha ocultado ningún dato sobre el mismo. Se trata de un producto catalogado como no peligroso sin incidencias significativas. La ficha de seguridad señala que no se requieren primeros auxilios específicos ante el contacto con ojos, piel, por ingestión o inhalación.