David Carapapa: "Como músico, Paco mantenía la esencia de lo clásico"

El fallecimiento de Paco Rosado ha dejado muy afectado a David Márquez Mateos, David Carapapa. Ambos estaban unidos por una gran amistad labrada en la época en la que Paco regentaba el bar La Copla, en la calle Marqués de Valdeíñigo: "Allí hemos pasado muy buenos ratos. Lo conocí y desde entonces tuvimos una gran amistad", explica David, quien de inmediato se acuerda de los familiares del carnavalero desaparecido y a los que envía un sincero abrazo. Su unión también se cimentó con la participación de Celso Rosado, hijo de Paco, en algunas chirigotas de los Carapapa.

Recuerda David, también destacado autor de chirigotas y comparsas, cómo Paco Rosado, su hermano Emilio y el Gómez "dieron un vuelco a la chirigota en los años 80", después de la tremenda repercusión de 'Los Cruzados Mágicos' y de los grupos que siguieron.

Respecto a su bagaje carnavalesco, afirma David Carapapa que Paco Rosado escribía "muy bien", al tiempo que destaca su estilo al frente de la música de los pasodobles de sus agrupaciones, extremadamente sencillos y cantables: "Como músico era de los que mantenía la esencia de lo clásico, de lo añejo, de lo antiguo. Él tenía su método y de ahí no se salía, y con razón además".

Y aunque en aquellas grandes chirigotas la letra aparecía oficialmente como "de la agrupación", de manera que no se sabía exactamente qué podía escribir cada uno, David recuerda que el carnavalero colaboró dejando su sello en algunas de las chirigotas de los Carapapa: "Tenía una calidad tremenda".

"Ha sido un palo muy gordo, porque tenía entendido que había mejorado. Un sobrino suyo sale con nosotros en la comparsa y nos tenía más o menos al tanto. Y más allá del primer sustillo, parecía que estaba mejor y estabilizado", concluye David.