El balance de la Real Balompédica Linense en las cuatro primeras jornadas en el grupo I de la Primera Federación (dos empates y dos derrotas) ha extendido dudas entre sus aficionados en torno a un sistema de juego muy definido, con mucha posesión de balón, que de momento no está dando resultados. Y ya se sabe que el fútbol solo entiende de marcadores. Esa incertidumbre no tiene reflejo, sin embargo, de puertas para adentro. Con sus matices, porque todo es susceptible de ser mejorado, tanto el cuerpo técnico como los futbolistas sostienen que es el camino correcto para escalar en la clasificación. Este martes uno de los responsables sobre el césped de esa política futbolística, Antonio Romero, ha defendido con vehemencia esa doctrina.

El mairenero reconoció en declaraciones a Álvaro Gallardo, en Radio Algeciras de la Cadena Ser, que a la caseta le resulta “frustrante” no haber conseguido aún ese esperado primer triunfo después de, entiende, haber hecho méritos para que se hubiese consumado. “No entendemos otro camino para conseguir el triunfo”, defendió en clara alusión a la forma de jugar de su equipo.

El mensaje del centrocampista a la parroquia albinegra es tan claro como tranquilizador. “Tenemos un margen de mejora muy grande y estamos convencidos de que más pronto que tarde sumaremos de tres en tres”.

“El contrario también tiene sus armas, sus fortalezas y a veces cuesta que ese dominio se traduzca en goles pero estamos ahí, no podemos desfallecer ahora ni cambiar nuestra idea de ver el fútbol por estos resultados', insistió.

“Las victorias son las que dan alegría, firmeza en tu trabajo, tranquilidad, y tanto el míster como los jugadores vamos unidos y estamos deseando de poder brindarle a la afición ese triunfo que tanto echamos en falta”, dijo una vez más.

Con todo, Antonio Romero dejó claro que una de las asignaturas pendientes de esta Balona 2022-23 es aprender a “jugar a ese otro fútbol”. “Con el Mérida [en referencia al partido del pasado domingo] ya empezamos a hacerlo y estamos en ese camino para poder cerrar partidos”, abundó.

Romero recalcó en su comparecencia la dureza de la Primera Federación. “Para mí es una Segunda División dividida en dos grupos, tiene un nivel altísimo con equipos que podían estar en el fútbol profesional y otros con un nivel alto de la antigua Segunda B, es complicado enfrentarte a ellos porque hay mecanismos buenos y con jugadores de mucha calidad”.

Con independencia de la marcha del equipo en este primer mes de competición, el centrocampista de Mairena del Aljarafe suscribió un alegato en defensa de La Línea y del vestuario del que es inquilino. “He encontrado una ciudad y un equipo que me sientan bien, estoy convencido de que el buen ambiente que hay en el vestuario verá sus frutos antes de lo que pensamos”.