Antonio Fernández Rivadulla debutará el próximo domingo como entrenador de la Real Balompédica Linense en lo que a partidos en el Ciudad de La Línea se refiere. Tras el fiasco que supuso su estreno en Cartagena ante el Rácing el duelo ha adquirido una trascendencia especial para el desenlace liguero de los albinegros en la andadura de su desembarco en Segunda Federación. Además de lo que supone someterse por primera vez al juicio de la hinchada y más con tres puntos de tanto valor en juego, Antonio Fernández lo hará frente al equipo en el que vivió sus mayores momentos de gloria, el San Roque de Lepe.

El actual entrenador de la Balona llegó al conjunto lepero en octubre de 2019 tras la destitución de Juan Carlos Camacho. Por entonces los aurinegros habían sumado cinco puntos en nueve partidos. Cuando el Covid-19 obligó a detener la competición, el San Roque ya estaba afincado en una cómoda undécima plaza. El club renovó a su entrenador hasta junio de 2023.

La campaña siguiente, la post-coronavirus, los onubenses subirían a Segunda Federación como subcampeones de la fase de ascenso, solo por detrás del Xerez Deportivo.

Paco Cortes sostenía en Huelva Información -periódico como Europa Sur perteneciente al Grupo Joly- que se trataba de "un año mágico" y añadía: "Los inversores suecos y el técnico Antonio Fernández sentaron las bases del exitoso proyecto"

La 21-22 tuvo un desenlace especialmente polémico que perjudicó al conjunto lepero, que al final fue sexto y se quedó a las puertas de lograr el billete para el play-off.

La última jornada no pudo estar más salpicada de acontecimientos como poco, muy extraños. "En el minuto 93 de su partido ante el Mensajero, el Coria perdía 1-2. Un resultado que dejaba al club cacereño fuera de las plazas de promoción de ascenso a la Primera RFEF, en beneficio del San Roque de Lepe. Lo que sucedió a continuación, en apenas un minuto, ha levantado una enorme polvareda en el mundo del fútbol. Dos acciones casi consecutivas que han provocado graves acusaciones por parte del San Roque, que acusa al Mensajero de haberse dejado ganar y al Coria de haber amañado el encuentro", se leía en un diario de tirada nacional.

"Desde el CD San Roque de Lepe ante las muestras inobjetables y deplorables de antideportividad acaecidas en el encuentro celebrado entre el CD Coria y el CD Mensajero, hemos decidido iniciar los trámites jurídicos pertinentes para que se analicen los hechos por los organismos correspondientes, a fin de defender la deportividad, la integridad y el juego limpio", publicó el club onubense. Como tantas veces en el mundo del balompié, sus quejas cayeron en saco roto.

Fernández Rivadulla negoció su marcha de Lepe para firmar en Primera RFEF con un Pontevedra cuya camiseta ya había portado. Pero eso ya pertenece a otra historia, que nada tiene que ver con la que se trata.

Antonio Fernández, en su etapa en el San Roque de Lepe

“Es un club al que le tengo un cariño especial y del que solo puedo decir cosas buenas. Le estaré agradecido eternamente. Por fortuna conseguí éxitos en el San Roque de Lepe y eso te deja huella, como me ha sucedido con otros clubes. Es evidente de que es el más reciente y en el que me dí a conocer en el sur”, dice el míster albinegro.

“Si soy sincero tengo que reconocer que me hubiese gustado que ya se hubiesen jugado los dos partidos entre la Balona y el San Roque”, añade. “Me refiero a nivel personal, porque los dos nos estamos jugando mucho”.

“Pero las cosas son como son, el fútbol profesional no entiende de temas sentimentales y cuando el árbitro pite mi única misión será que mi equipo sea mejor que el rival y que podamos conseguir esos tres puntos que tanto queremos, delante de nuestra gente”, abunda.

Preguntado por si es correcto el análisis de que el Balona-San Roque de Lepe es un partido por la permanencia, Fernández Rivadulla responde: “No diría que es un partido por la permanencia. Quedan ocho semanas y suceda lo que suceda quedarán muchos puntos en disputa. Lo que está claro es que es un partido muy importante y que nosotros queremos cambiar la desilusión que se respira y brindar, al menos, una pizca de ilusión. Los jugadores y el cuerpo técnico estamos trabajando y mucho para revertir esta situación”.