“Los conversos nos hemos visto en la necesidad de construir nuestra identidad musulmana con arreglo a nuestro contexto social y cultural”. Así se expresa Isabel Romero, musulmana española y presidenta de Junta Islámica, cuando se le pregunta por el islam español: “El nuestro no es un islam diferente a otro, sino que sabemos que hemos de vivirlo en una sociedad aconfesional, con diversidad religiosa, respetando y conviviendo”.
La mayoría de los españoles musulmanes no se identifican culturalmente con aquellos llegados del Magreb a partir de los 90; entienden que “muchos de estos pretenden construir en España la sociedad patriarcal y teocrática que añoran, conceptos que son totalmente ajenos a nuestra espiritualidad”, explica en Algeciras Abdeláh Domínguez, otro español converso al islam.
Romero admite que “hay países y grupos de presión que quieren controlar el islam en España por razones políticas e ideológicas, y estas injerencias provocan distorsiones entre el islam normalizado y determinadas visiones a las que solo interesa el ruido, el conflicto y la diferencia”.
“Tenemos que reivindicar la existencia de Al Ándalus y su legado de ocho siglos desde una perspectiva identitaria que ayude a comprender qué significa ser español en el siglo XXI”, indica. Para esta líder, los españoles musulmanes han tenido que elegir entre parecerse a sus hermanos del norte de África o a otros. “Al Ándalus fue un periodo de gran esplendor que nos ha de servir de referencia”, cocluye.
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