Con los días contados para convocar elecciones autonómicas el 22 de marzo, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha dado este viernes un paso más al trasladar al líder de IU, Antonio Maíllo, que "es el momento de los andaluces". Los máximos dirigentes de los partidos que forman el Gobierno andaluz de coalición (PSOE e IU) han mantenido una reunión imprevista en el Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia de la Junta, y han evidenciado en declaraciones posteriores a los periodistas que la crisis del Ejecutivo se encuentra en una situación irreversible.

La presidenta ha manifestado que Antonio Maíllo "sabe perfectamente que no hay estabilidad ni confianza" en el Gobierno de coalición, y que "es el momento de los andaluces". "Antes de que ellos decidan por el conjunto de los andaluces, yo les daré la voz", ha recalcado Díaz. La socialista se ha preguntado por qué IU "ha puesto en cuestión" el Gobierno de coalición "si están tan convencidos de la estabilidad" del Ejecutivo, y ha insistido: "¿Por qué lo han puesto en cuestión con un referéndum y le han puesto fecha de caducidad e interinidad a este Gobierno?", en alusión a la consulta anunciada por IU para junio sobre su continuidad en el gobierno.

Sobre si hay alguna posibilidad de acuerdo, Díaz ha respondido: "No hemos sido nosotros, ni esta presidenta, quienes hemos puesto fecha de caducidad al Gobierno". En su opinión, "hay que ser responsable y saber lo que hay que hacer cuando se está dentro de un Gobierno, que es dar respuesta a los nueve millones de ciudadanos" de la comunidad.

Por el contrario, el coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha vinculado la estabilidad al cumplimiento de las leyes contenidas en el pacto de Gobierno y ha confesado que "en absoluto" ha salido satisfecho del encuentro. "No hay razones objetivas para la ruptura. Se empiezan a buscar excusas en función de intereses que no tienen nada que ver con los intereses de Andalucía y de la gente que necesita de una administración autónoma que esté al cien por cien desarrollando políticas y ejecutando programas", ha censurado. Respecto a si la coalición se ha planteado que sus tres consejeros abandonen el Gobierno si Díaz confirma el adelanto electoral, Maíllo ha advertido de que IU "no va a entrar en cualquier juego de ruptura pactada" y que no tienen por qué dejar sus cargos porque “no han hecho nada”.

A la crisis andaluza se ha referido también la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que cree que adelantar las elecciones "siempre es un fracaso del proyecto de Gobierno". Ha asegurado que Susana Díaz deberá explicar los motivos de un adelanto y si responde a sus intereses o los del PSOE. El secretario de Política Federal del PSOE, Antonio Pradas, ha manifestado, por su parte, que el anticipo electoral es "una decisión personal" de la presidenta y que no afecta a los planes del PSOE para las elecciones municipales y autonómicas de mayo.

Todo indica que el próximo lunes, tras la celebración de un pleno de urgencia del Parlamento andaluz, o el martes Susana Díaz convocará elecciones anticipadas para el 22 de marzo. El PP andaluz, según su vicesecretaria general, Virginia Pérez, está "completamente preparado para afrontar" la cita, aunque ha lamentado que Díaz "juegue con la estabilidad de Andalucía para sus fines personales".