Algeciras pone a punto los trajes de los Reyes Magos y todo su séquito de la cabalgata con un contrato de 5.000 euros
Un servicio de limpieza, arreglos y tallaje personalizado mantendrá impecables los atuendos de estos queridos personajes durante los próximos dos años
La cabalgata de Reyes de Algeciras cambia de itinerario por las obras en Capitán Ontañón
Algeciras/La magia de los Reyes Magos no se improvisa. En Algeciras, los trajes de sus majestades y de todo su séquito real serán objeto de una minuciosa puesta a punto gracias a un contrato licitado por el Ayuntamiento. Con un presupuesto de 5.000 euros y un plazo de ejecución de dos años, se busca garantizar que la cabalgata de Reyes Magos 2025 brille con la misma perfección que cada 5 de enero desata sonrisas entre pequeños y mayores.
El servicio contratado abarca la limpieza exhaustiva de las prendas, la reparación de desperfectos, la reposición de encajes, cintas y abalorios, y, por supuesto, la adaptación de los trajes a las medidas de quienes, cada año, encarnan a los Reyes, pajes y otros personajes emblemáticos, como la Estrella de Oriente o el Cartero Real. La empresa adjudicataria también deberá encargarse de los tocados, coronas y guantes, asegurando que ningún detalle quede al azar.
“Cada personaje tiene su propio peso en la ilusión colectiva, y eso incluye que todo esté a su medida, desde un broche hasta el último dobladillo”, detalla el pliego de condiciones. Las prendas, tras la correspondiente limpieza y arreglo, deberán estar listas y entregadas a la Delegación de Feria y Fiestas antes del 23 de diciembre, asegurando que todo esté preparado para el desfile.
El Ayuntamiento ha justificado esta contratación externa señalando la falta de recursos materiales y humanos para abordar estas tareas con los medios municipales. Además, se realizará un control riguroso sobre la calidad del servicio prestado, con inspecciones sin previo aviso para garantizar que el glamour y la tradición navideña de Algeciras se mantengan a la altura de las expectativas.
Así, mientras los pequeños de la ciudad sueñan con los regalos que traerán Melchor, Gaspar y Baltasar, el Ayuntamiento trabaja para que sus majestades luzcan impecables. Porque, al final, la magia también se cose, se lava y se ajusta a la medida del asombro.
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