El suicidio de un interno acaba en una violenta protesta en la cárcel de Botafuegos

La cárcel de Botafuegos, en Algeciras, sufrió una complicada situación este sábado cuando el suicidio de un interno estuvo cerca de derivar en un motín. Los sindicatos penitenciarios han denunciado que, con escenarios como este, la sanidad de las cárceles "se está muriendo".

En torno a las 13:00, un funcionario del módulo 10 alertó de un "código 5", correspondiente a que la vida de un interno peligra. Los servicios sanitarios acudieron a toda velocidad para intentar salvar al recluso, de origen marroquí y nacionalidad española que intentó suicidarse por ahorcamiento. Durante más de media hora intentaron reanimarle, pero no fue posible. A sus 29 años, llevaba desde 2019 en prisión y su salida estaba prevista para 2025.

Aprovechando esta circunstancia, un grupo de internos del módulo residencial donde se desarrollaron los hechos y, también del módulo frente a éste, de forma violenta aprovecharon para reclamar más médicos y una mejor atención sanitaria en la prisión. Por ello, arrojaron a través de las ventanas de las celdas diverso mobiliario del centro y papeles en llamas, vociferando insultos y amenazas a los profesionales e incitando al resto de reclusos a actuar de forma idéntica.

El jefe del servicio informó de los hechos al mando de incidencias, personándose el subdirector de Seguridad, el director y subdirector de tratamiento, que ordenaron el cumplimiento del protocolo establecido al efecto. Tras casi dos horas, la grave situación quedó resuelta con el aislamiento provisional de los tres internos cabecillas del incidente.

El sindicato ACAIP ha pedido a la Dirección del Centro que se estudie para los tres internos la propuesta de regresión de grado y su traslado a otro Centro Penitenciario que se adecúe mejor a su comportamiento penitenciario.

"Llevamos años avisando que la sanidad penitenciaria española se está muriendo y por múltiples motivos, los facultativos no quieren desarrollar su trabajo en las cárceles por la alta carga laboral, un medio hostil, peores condiciones económicas… y así lo hemos denunciado repetidamente a los distintos organismos públicos como son la Inspección de Trabajo de Cádiz, Colegio de Médicos, Subdelegación del Gobierno de Cádiz, Defensor del Pueblo, RRHH de Instituciones Penitenciarias, secretario general de prisiones y el ministro del Interior. Ninguno de ellos ha ofrecido soluciones", han expresado desde el sindicato Acaip.

"La única solución, y por el bien de todos los profesionales penitenciarios e internos, es que lo más pronto posible la Sanidad Penitenciaria sea transferida a la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, en cumplimiento de la Ley de Cohesión y calidad de la Salud del año 2003", han sentenciado.