La solera de los bares algecireños

Una placa en la puerta de un bar en Algeciras da la pista al visitante de que se encuentra en un establecimiento especial, nunca mejor dicho. Si se para a leer el letrero que reza "establecimiento con solera" ya no hay duda de que es un bar que ofrece todo el sabor algecireño y sobre todo mucha historia.

La concejalía de Feria y Fiestas del Ayuntamiento de Algeciras lleva más de una década otorgando este galardón a los establecimientos algecireños más representativos de la ciudad. Otro aspecto en común es que estos bares, además de ser de sobra conocidos por todos los algecireños e incluso campogibraltareños, han visto apostados en sus barras varias generaciones de ciudadanos, que dado los tiempos que corren en los que las cadenas de restauración se están implantando no es poco.

Uno de los más representativos de la ciudad cumplió en 2007 60 años con sus puertas abiertas en Blas Infante, Casa Castro. Recibió la distinción de Feria y Fiestas en el año 1997 como broche a su medio siglo de vida.

En el año 2000, el galardón recayó en otro bar mítico de la ciudad, Casa Rebolo. Ubicado en calle Sevilla, sus tapas han sido degustadas por ciudadanos de a pie y por multitud de famosos que no han dejado pasar la oportunidad de visitar a Rebolo. Enfrente de él Casa Dioni fue declarado establecimiento con solera en 2005 junto a Pepe Troya.

En 2001, fue premiada la barra del bar Constante y en 2002 Casa Miguel.

Un año después Lo de Silva pasó a engrosar la lista de los bares con más clase de Algeciras, según la concejalía de Feria y Fiestas.

En 2004, el incombustible Casa Montes colocó la placa en la puerta de su restaurante. Un poco más abajo Casa María también lo logró. Ambos son referentes en platos del día, aunque también ofertan una amplia carta.

En el 2006, Feria y Fiestas consideró que el Bar la Verdad era merecedor del premio, un año después se lo llevó el bar El Tropezón. El último en sumarse a esta lista honorífica ha sido el Bar La Casita, en calle Tarifa.

La distinción de establecimiento con solera suele ser impuesto por el Ayuntamiento durante la celebración del Carnaval Especial.

Todos los bares que tienen esta placa en su puerta ya han pasado a convertirse en patrimonio del pueblo algecireño.

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