Otro retraso del tren Algeciras-Madrid: ocho horas, hambre y cansancio en un viaje interminable

El Alvia que salió este lunes a las 15:25 llegó a Atocha a las 23:20 tras detenerse en Córdoba por “motivos técnicos”

Renfe modificará los horarios desde el 16 de octubre ante las obras de Adif, mientras el alcalde de Algeciras denuncia una “situación intolerable”

Renfe cambia los horarios de los trenes con destino y origen en Algeciras por las obras de la línea a Bobadilla

Un tren Alvia de Renfe en la estación de Algeciras.
Un tren Alvia de Renfe en la estación de Algeciras. / Andrés Carrasco
G.S.G.

Algeciras, 14 de octubre 2025 - 09:47

De tanto repetirse, el retraso del tren que une Algeciras con Madrid ha dejado de ser noticia. O, mejor dicho, ha dejado de sorprender. Lo anómalo se ha vuelto costumbre, como esas goteras que ya nadie repara porque forman parte del paisaje. Este lunes 13 de octubre, el Alvia que partió a las 15:25 de la estación algecireña, con la ilusión cansada de quienes viajan hacia la capital, debía llegar a Atocha a las 21:20. Lo hizo dos horas más tarde, a las 23:20, tras detenerse largo rato en Córdoba “por motivos técnicos”.

A esa hora, los pasajeros bajaban del tren con el gesto torcido de los que han perdido la fe en los horarios. Casi ocho horas de viaje, más de lo que tarda un avión en cruzar medio Atlántico. “Muertos de hambre”, resumía uno de ellos, mientras arrastraba la maleta como quien arrastra una idea fija: esto no puede seguir así.

Pero sigue.

Y seguirá, al menos de momento.

Renfe ha anunciado que a partir del 16 de octubre modificará los horarios de todos los trenes con origen y destino Algeciras “para adaptarlos a los tiempos reales de recorrido” durante las obras que Adif ejecuta en la línea Bobadilla-Algeciras. En lenguaje oficial: los viajes serán aún más largos. En lenguaje humano: la resignación tendrá que madrugar quince minutos más.

Los cambios afectarán tanto a los servicios de Media Distancia —Algeciras-Antequera AV— como al Alvia que conecta la ciudad con Madrid. El tren de las 15:25 retrasará su salida a las 15:54, con llegada prevista a las 22:04. El trayecto en sentido inverso, que parte de la capital a las 8:05, llegará a Algeciras a las 14:12. “Estos ajustes conllevan incrementos en los tiempos de viaje actuales”, explica Renfe, “para garantizar la seguridad y fiabilidad de las circulaciones”.

Mientras tanto, desde Algeciras, el alcalde y senador del PP, José Ignacio Landaluce, ha vuelto a poner el asunto sobre la mesa del Senado. En una pregunta dirigida al Gobierno, el regidor pide saber cuántos trenes han sufrido retrasos entre 2020 y 2025, el porcentaje de puntualidad por año y la antigüedad del material rodante que cubre la línea. “Es una situación intolerable que se repite con demasiada frecuencia”, lamenta Landaluce, que acusa al Ejecutivo de “falta de compromiso con el Campo de Gibraltar”.

“Mientras el Gobierno promete, nosotros seguimos esperando: cada vez más desconectados, cada vez más olvidados”, protesta. Y no le falta razón: en el sur, la palabra espera tiene estación propia.

En la terminal de Atocha, los viajeros del Alvia recogen sus maletas con ese silencio de las derrotas cotidianas. Nadie protesta. Nadie exige. Solo miran el reloj, como si esperaran entender algo. Pero el tiempo, en esta línea, hace mucho que dejó de pasar.

stats