Una puerta que abre puertas

La pasada semana se hicieron oficiales las partidas del ejercicio 2011 para la provincia del denominado Fondo Autonómico de Inmigración, una línea de ayuda de la Junta a los ayuntamientos para impulsar políticas en materia de extranjería. A Algeciras le han correspondido 18.380 euros. La Fundación de Bienestar Social no dedica este dinero a poner en marcha algún programa de actividades en concreto, sino que lo invierte en la contratación de dos profesionales que ofrecen una asistencia funcional a los inmigrantes radicados en el municipio.

En la delegación existe una oficina de atención al público especializada en las demandas de la comunidad inmigrante. En ella trabajan una asesora jurídica y una trabajadora social. Es una unidad que se ocupa, más que de la ayuda comunitaria como comúnmente se entiende, del asesoramiento en los trámites precisos de regularización, el arreglo de documentación, etcétera, lo que no deja de ser también una prestación social. Es una labor que ante todo cumple fines de "integración", destaca Paula Conesa, concejala de Bienestar Social.

El volumen de asistencias acumuladas en lo que va de año es similar al de las registradas en ejercicios anteriores. En algunas materias los últimos meses sí han deparado cambios significativos con respecto a otras épocas.

La crisis, que alcanza todos los rincones, se ha dejado notar también en uno de los asuntos que gestionan estas dos profesionales municipales. Se trata en concreto de las regularizaciones por arraigo social. Uno de los requisitos para acogerse a esta autorización es la presentación de un contrato de trabajo de al menos un año de duración que contenga una claúsula que establezca que entrará en vigor cuando se apruebe el permiso.

"El arraigo social ha disminuido considerablemente por los problemas económicos de los empleadores", confirma Conesa. "Se dan cuando se tiene una oferta de empleo. Como muchas empresas están ahora económicamente muy mal y además muchas tienen deudas con la Seguridad Social, como no pueden emplear, el arraigo social ha bajado mucho. Muchos informes de arraigo están saliendo negativos por esos motivos", explica la edil.

Lo que sí ha aumentado, constata la concejala, es el arraigo familiar, esto es, la regularización de aquellos inmigrantes que tengan hijos nacidos en España, una novedad de este año de la Ley de Extranjería. "Lo que se intenta es la reagrupación de la familia una vez que el niño tiene derecho porque es español", instruye Conesa.

Los municipios perceptores del Fondo Autonómico de Inmigración tienen un año desde la publicación de la orden en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) para realizar las actuaciones asociadas al mismo, que justificarán con posterioridad. En el caso de Algeciras, se presentan las nóminas de esas dos trabajadoras que guían a los que vienen de fuera a asentarse en una nueva tierra.