Paco de Lucía se ha convertido en un peculiar estímulo pedagógico para los niños que van al colegio público Campo de Gibraltar, ubicado en La Bajadilla, donde el guitarrista nació, creció y estudió. El hecho de saber que un niño que, como ellos, creció en las calles de esta barriada de Algeciras llegó tan lejos se ha conjugado como el pilar de un proyecto educativo que trata de reforzar la autoestima de los alumnos de este colegio, al que muchos en la ciudad han estigmatizado como un centro gueto porque un 43% de su alumnado es inmigrante.

“La Bajadilla quiere a Paco” es el título de la iniciativa pedagógica puesta en marcha por la Asociación para el Desarrollo Social Transfronterizo (Crehas) en este colegio con la financiación de la Diputación de Cádiz, que ha hecho del músico universal un ejemplo de superación para los alumnos.

Más de 250 alumnos de tercero a sexto de Primaria están investigando la vida de Paco de Lucía con preguntas a sus padres, abuelos y vecinos; han visto el documental La Búsqueda, sobre la vida del músico algecireño, están escribiendo redacciones sobre el hijo de Antonio Sánchez y Lucía Gomes y han visto, y algunos de ellos han colaborado, en la elaboración de un mural de grandes dimensiones a la entrada del barrio en el que se ve la figura del guitarrista bajo un eslogan que dice “La Bajadilla quiere a Paco”.

Redacciones elaboradas por los alumnos

El objetivo que ha llevado a Crehas a desarrollar esta iniciativa es reforzar la autoestima de los niños de un colegio que está en un barrio obrero donde conviven personas trabajadoras de muy diverso origen cultural, “que está históricamente olvidado por las administraciones y marginado en el imaginario colectivo de la ciudad”.

Los alumnos conocen la casa donde nació Paco, los colegios a los que asistió, la vivienda humilde donde aprendió a tocar la guitarra, la fuente a la que iba a por agua, el río en el que cogía ranas y los llanos donde jugaba al fútbol. También escuchan cómo su hermana María lo cuidaba y le cantaba nanas cuando solo era un bebé de meses, cómo su padre y su madre trabajaban de noche y de día para criar y alimentar a su familia de cinco hijos y cómo Paco se esforzó, hora a hora, día a día y año a año para aprender a tocar el instrumento y convertirse en el mejor tocaor de la historia.

Reforzar la autoestima de los alumnos del colegio, para que sientan el orgullo de vivir en el mismo barrio en el que nació, vivió, jugó, estudió y aprendió a tocar la guitarra Paco de Lucía, es una de las metas de este proyecto. También hacer gala de buenas prácticas en educación para acabar con la mala fama que rodea al colegio Campo de Gibraltar; mejorar y reforzar la convivencia de los alumno y ayudarles a valorar sus orígenes, sean cuales sean.

En paralelo, el colegio ha puesto en marcha una especie de programa para que los alumnos muestren y practiquen sus propios talentos sobre un escenario dispuesto en el centro.