"Que llueva lo que quiera, que el verano lo seca todo"

"Que llueva lo que quiera, que el verano lo seca todo" es un dicho de antaño; la patética ansiedad por la lluvia en la mitad sur de la península, castigada con frecuentes años de sequía, ha hecho implorar a los agricultores y ganaderos: "¡Que llueva, aunque sean piedras!" (granizo).

El presente año meteorológico (1º octubre 2008 al 30 septiembre 2009) parece que está cumpliendo al gusto de todos; incluso de los urbanitas, que sólo consultan con interés las reservas de los embalses por si garantizan o no que haya restricciones de agua en varios años.

Las lluvias de la segunda mitad de enero y primeros días de febrero fueron tan copiosas y mantenidas que, empapada la tierra, entre el 22 y 23 de enero el embalse de Guadarranque recibió 6 Hectómetros cúbicos (6 millones de metros cúbicos ó 6.000 millones de litros), pasando su ocupación del 87 al 95 por ciento. El Charco Redondo recibió en esos dos días un aporte similar y pasó del 84 al 92 %.

Sin embargo, la lotería de la lluvia -porque es como una lotería-, da pocos premios gordos y muchas pedreas. La provincia de Cádiz fue una de las más favorecidas. El 9 de febrero, el superávit de lluvias acumuladas desde el 1º de octubre (comienzo del año meteorológico 2008/2009), en tantos por ciento y -entre paréntesis-, el que tienen ahora, en Algeciras del 53% baja al 32%, Tarifa 131 % (111%), Cádiz 58 % (44%), Jerez 28 % (18%), y Grazalema, la localidad con la media anual pluviométrica más elevada de España (2.200 litros por metro cuadrado): que tenia un superávit del 59 % -porcentaje que no registraba por esa fecha desde hacía muchos años-, ha pasado al 40 %. Ha de tenerse en cuenta que en febrero no novió nada durante 21 días consecutivos.

Para tener idea aproximada de lo desigual que ha sido el reparto pluviométrico, los superávits actuales más destacados son: La Mojonera (Almería) con el +151 %, Ceuta +129 %, Tarifa +111 %, Pontones (Sierra de Cazorla, Jaén) +59 %, Nerja (Málaga), +50 %, Lanjarón (Granada) +43 % y Torremolinos (Málaga) del +42 %. En cuanto a los déficits, en este año -no precisamente de sequía-, destacan: Huelva capital con el -26 %, Ginés (Sevilla) -24 %, Ayamonte (Huelva) -22 %, y Sevilla capital -20 %. Déficits por debajo de este porcentaje se encuentran en numerosas localidades, sobre todo de las provincias de Sevilla y Córdoba.

El porcentaje de ocupación de los embalses en Andalucía es muy variable entre si. En nuestra provincia, desde el día 10 de febrero, Guadarranque y Charco-Redondo se han mantenido en el 100 por 100 %, vertiendo agua a sus correspondientes ríos en previsión de futuras riadas. El de Los Hurones pasó del 91 al 87 %, Zahara-El Gastor del 57 al 58 %, Bornos del 82 al 83 %, Arcos se mantuvo en el 100 %, Guadalcacín del 28 al 31 % -pero hay que tener en cuenta que su capacidad es 11 veces superior a la del Charco Redondo-, Barbate del 61 al 62, Celemín del 88 al 86, y el Almodóvar se mantuvo en el 100 %.

En cuanto al resto de las cuencas de la mitad sur de la península: en la Mediterránea Andaluza (exceptuando los embalses de Guadarranque y Charco-Redondo), sus reservas han subido del 38 al 40 %, la del Guadalquivir del 46 al 50%, Guadiana del 52 al 53 %, Tajo del 51 al 53 %, Segura del 27 al 31 %, y Júcar del 33 al 35 %. Como en el acumulado de las precipitaciones pluviométricas, ha de tenerse en cuenta que durante 21 de los 28 días de febrero no llovió nada en absoluto, y los caudales de los arroyos y ríos descendieron en consecuencia.

En definitiva, un buen año meteorológico para nuestro país, sobre todo para la mitad sur, que venía padeciendo varios años de evidente y preocupante sequía.