La dirección del Club Hípico Botafuegos cierra el restaurante

La dirección del Club Hípico Botafuegos cerró anoche sus puertas de manera definitiva. Las únicas instalaciones del complejo que se mantendrán abiertas al público son las cuadras y el picadero.

Con el cierre del restaurante, la dirección del complejo se ha visto obligada a despedir a 17 trabajadores, que se suman a los que ya se quedaron sin empleo el pasado mes de agosto cuando la Policía Local clausuró la piscina y las ocho pistas de pádel por carecer de licencia de construcción.

El dueño del club, José Galán, insiste en que el proyecto que presentó a la Gerencia de Urbanismo en el año 2002 para solicitar la licencia contemplaba la puesta en marcha de un restaurante. De todas formas, Galán quiso aclarar que ha cerrado el restaurante por que desde que precintaron la piscina y las pistas había perdido clientela.

El concejal de Urbanismo, Diego Sánchez Rull, ya explicó que en el restaurante se celebraban bodas y comuniones, una actividad que no contaba con los requisitos que exige la ley y que Urbanismo ya había instado a la dirección del Club Hípico a que cerrara el restaurante a final de mes.

El propietario del complejo hípico presentó en el mes de septiembre a Urbanismo un proyecto de viabilidad sobre la piscina y las pistas de pádel. El arquitecto municipal estudia la propuesta y de momento no hay novedades al respecto.

Cabe recordar que la dirección del club ha sido sancionada con un millón de euros por construir sin la pertinente licencia.