Salud y seguridad

El botellón en Algeciras en tiempos de coronavirus: 128 denuncias durante el fin de semana

  • La Policía Local y la Nacional actúan en el Llano Amarillo, La Menacha y los alrededores de varios colegios

Restos del botellón en el Llano Amarillo de Algeciras.

Restos del botellón en el Llano Amarillo de Algeciras. / Erasmo Fenoy (Algeciras)

La campaña que el Ayuntamiento de Algeciras mantiene para erradicar el consumo de bebidas alcohólicas en espacios públicos se ha saldado este fin de semana con la interposición de 128 denuncias.

Un dispositivo especial formado por agentes de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía ha actuado desde la noche del viernes en distintas zonas de la ciudad en las que algunas personas, especialmente grupo de jóvenes, se reúnen para consumir alcohol, sin mascarillas y sin mantener la distancia social.

Los puntos en los que han sido llevados a cabo estas intervenciones han sido el Llano amarillo, La Menacha y los alrededores de varios colegios. El operativo se ha saldado con la imposición de 128 denuncias por incumplimiento de la prohibición sobre la realización del botellón, a las que hay que unir otras 16 por consumo y tenencia de sustancias estupefacientes, 6 por falta de respeto a los agentes intervenientes, y otras 9 por diferentes cuestiones relacionadas con el tráfico.

Igualmente, se procedió a la detención de un individuo por atentado contra agentes de la autoridad, y hubo dos investigados no detenidos tras ser sometidos a sendas pruebas de alcoholemia y arrojar resultados positivos.

Jacinto Muñoz Madrid, concejal delegado de Policía Local, ha indicado que estos operativos especiales se van a mantener activos todos los fines de semana y ha hecho un nuevo llamamiento “a la sensatez, la cordura y la responsabilidad de la ciudadanía, especialmente a los jóvenes".

"La lucha contra la pandemia no ha acabado, siguen los contagios y por desgracia los fallecimientos, y la práctica del botellón está considerada insalubre y nociva por la Junta de Andalucía, por lo que arriesgarse a hacerla no solo conlleva sanción económica, sino lo que es más grave, puede poner en riesgo la salud y la vida de quienes lo hacen, y de sus seres queridos”, ha concluido.

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