Los padres del Virgen de la Esperanza adoptan el absentismo como protesta

Los padres de alumnos del Virgen de la Esperanza cumplieron ayer su palabra. De hecho, a las nueve y media de la mañana una treintena de personas se concentró a las puertas del centro de Educación Especial para dejar claro que sus hijos no asistirán a clase de forma indefinida hasta que no "sean corregidas las deficiencias".

En la manifestación destacó sobre todo la indignación de los progenitores. Junto a ellos, el delegado de Educación en Comisiones Obreras, Sebastián Alcón, lamentó que la delegada de Educación, Blanca Alcántara, prometiera que los desperfectos estarían arreglados en quince días y no lo haya cumplido.

El delegado sindical apoyó así la medida adoptada por los padres. En este sentido, respaldó el absentismo escolar argumentando que "es obligatorio llevar a los hijos al colegio, pero no a un colegio en obras". Alcón fue más allá al desvelar que los padres de los alumnos le han mostrado sus quejas porque las obras pendientes en el centro "para colmo" están paradas. "Han abierto el centro para tener encerrados a los niños en las aulas sin que puedan disfrutar del taller de hogar ni del aula de informática", sostuvo.

Desde CCOO reconocieron que la dotación de personal está completa aunque insistieron en la falta de materiales. Asimismo, subrayaron que los alumnos querían entrar ayer a clase pero sus padres no les dejaron para exigir una solución rápida. "Las obras deben concluir lo antes posible para que los alumnos acudan a clase con todas las garantías", dijo Alcón.

La delegada de Educación de la Junta de Andalucía, Blanca Alcántara, solicitó ayer a los progenitores un poco de comprensión, dadas las circunstancias que han rodeado la construcción del nuevo centro. "Pido comprensión -y también paciencia- porque no hay que olvidar que la administración educativa -a través de Infraestructuras y Servicios Educativos (ISE) Andalucía- ha realizado un enorme esfuerzo, que creo que no se puede cuestionar, para acelerar la terminación de la obra del nuevo centro Virgen de la Esperanza tras el abandono de la misma por la empresa adjudicataria", aseveró.

Educación en cualquier caso garantizó que el colegio tiene las condiciones de habitabilidad y seguridad indispensables. "Quedan zonas por concluir pero no se justifican como obras de emergencia como la piscina terapéutica o el salón de actos", explicaron.