La Audiencia de Cádiz absuelve al capitán de la Guardia Civil Joaquín Franco de vínculos con el narcotráfico

Algeciras/La Sección séptima de la Audiencia de Cádiz, con sede en Algeciras, ha absuelto al capitán de la Guardia Civil Joaquín Franco de mantener vínculos con el narcotráfico tras el juicio celebrado los pasados días 14 y 15 de septiembre, según ha confirmado Europa Sur por varias fuentes.

Franco era el jefe de la Policía Judicial de la Benemérita en Algeciras -un puesto clave, encargado de ejecutar y de velar por las investigaciones ordenadas de los jueces y fiscales- cuando el 3 de julio de 2019 fue detenido por agentes del departamento de Asuntos Internos.

La magistrada del Juzgado de Instrucción n.º 4 de Algeciras, Carmen Martínez, le atribuyó en la fase de diligencias los delitos de revelación de secretos, omisión del deber, prevaricación y pertenencia a organización criminal. No obstante, el capitán tenía ya abiertas en su contra otros procedimientos independientes en los juzgados. La Fiscalía de Algeciras deberá determinar ahora si recurre la sentencia.

La investigación en torno a Franco se enmarcaba en unas diligencias por su presunta relación con una trama de blanqueo de capitales vinculado al narcotráfico, en concreto, con la red de Emilio José Mazuelo Mesa, más conocido como Emilio El MoroEl Moro, detenido el 30 de enero de 2019 en Alcobendas (Madrid).

La detención de Franco partía de una investigación iniciada en 2018, en la que también fue detenido el 4 de enero de ese año un inspector de la Policía Nacional, J.T, y varias personas vinculadas al entorno del Puerto de Algeciras. Durante el registro de su vivienda, situada en Tarifa, la Guardia Civil, encontró 27.000 euros en efectivo.

En libertad desde 2020

Franco permanecía en libertad provisional bajo fianza de 30.000 euros desde febrero de 2020 y estaba suspendido de empleo y sueldo. El último acto público que contó cion su asistencia fue el 31 de mayo de 2019, en los homenajes rendidos a Fermín Cabezas, el guardia civil de Tráfico fallecido en accidente en la A-7 cuando perseguía a un coche dado a la fuga y cargado con un alijo de hachís.

Personaje controvertido y en el ojo del huracán por sus altas responsabilidades, Franco era para muchos un guardia civil con dilatada experiencia fuera de toda sospecha, si bien su detención no supuso ninguna sorpresa para otros, tanto dentro como fuera de la Benemérita.

Un tiroteo ocurrido el 15 de noviembre de 2017 en la barriada de El Saladillo, en Algeciras, en el que resultó herido de bala un agente de la Guardia Civil, y una reunión mantenida dos días más tarde por Franco con El Moro, varios de compinches de este último y un abogado, en una conocida venta a las afueras de Algeciras, fue uno de los episodios que alentaron la investigación sobre el capitán de la Guardia Civil.