El Club de Leones entregará dos sillas para discapacitados

El Club de Leones de Algeciras entregará la próxima semana dos sillas eléctricas para discapacitados gracias a la campaña de recogida de tapones de plástico que ha emprendido este colectivo. El acto tendrá lugar en el Casino -en principio el martes día 11 a las 12:00 horas- y los beneficiarios serán dos minusválidos de Algeciras y La Línea. El Club de Leones resalta que la iniciativa ha tenido una respuesta "extraordinaria" en la comarca, mayoritariamente a través de los escolares que han depositado los tapones en sus distintos centros educativos.

Luis Martín, miembro del colectivo, explicó ayer a este diario que hasta el momento se han recogido 30 toneladas de plástico. Un material que se vende -a 240 euros la tonelada- a una fábrica de Écija (Sevilla), que se encarga de fundirlo para elaborar nuevas piezas plásticas.

Martín se mostró entusiasmado al ver cumplida la finalidad de la campaña, que no es otra que la de poder adquirir las sillas para ayudar a estas personas de forma solidaria. Del mismo modo, resaltó que con esta iniciativa también se consigue mejorar el medio ambiente, ya que se recicla una gran cantidad de plástico, un material "en principio indestructible".

La campaña del Club de Leones ha tenido un gran eco en la comarca y fuera de ella. Muestra de ello es que les están llegando tapones desde Rota, Cádiz e incluso Don Benito, en Badajoz. Del mismo modo, utilizan una furgoneta para recoger los tapones de los centros de trabajo, sedes de colectivos y colegios que colaboran con ellos. El vehículo tiene capacidad para 800 kilogramos. Todo este material lo almacenan en un local en el mercado de la Victoria. Posteriormente, lo trasladan en camiones hasta Sevilla.

Martín explicó que las sillas eléctricas cuestan unos 5.000 euros, pero que el Club las adquiere en la fábrica a un precio más económico. No obstante, el colectivo se ha adaptado a las necesidades específicas de los destinatarios. Así, la persona con discapacidad de Algeciras reside en la barriada de El Rinconcillo y tiene que atravesar un camino de tierra para llegar a su casa. Por ello, se ha adquirido una silla especial para estas condiciones. El coste se ha elevado, pero se ha podido comprar gracias a los tapones del amor.