Beata Teresa ya no extraña a su Virgen

"Nuestro barrio huérfano no está". Para creyentes o menos creyentes, sin duda la Virgen del Carmen es un símbolo para la barriada Beata Teresa de Jornet, ubicada en el entorno del núcleo urbano de La Grana. Desde hace dos semanas la pequeña capilla de entrada a la urbanización yacía sin la imagen, su desaparición sin testigos ni culpables dejó un cristal roto y al vecindario compungido , muchos de ellos ancianos, que cada mañana se persignaban al pasar o le velaban al caer el sol, un barriada de gran tradición marinera, que se encomendaba a esta Virgen.

Medio centenar de personas rodeó la pequeña capilla al filo de las doce del mediodía, entre pequeños, ancianos y familias de la barriada. El Padre Ángel de la iglesia San Miguel Arcángel de La Granja acudió a la llamada de la asociación vecinal para bendecir a la nueva imagen que, tras la desaparición de la anterior, fue encargada bajo el coste de todos el barrio. Deseó felicidad "otra vez para la nueva Virgen", así dejó paso a los fieles para que fueran depositando uno a uno las flores, muchas de ellas claveles blancas.

Una nueva reja, de arriba a abajo, salvaguarda de cualquier intento vandálico que pueda alterar nuevamente a la urbanización Beata Teresa Jornet. Las mujeres pacientes antes de la bendición de la nueva Virgen del Carmen expresaban su pesar, "echábamos mucho de menos a la Virgen", "todas las noches le rezaba". Antonio Estévez, de la directiva del colectivo vecinal, lamentaba lo ocurrido, destacando la importancia de esta imagen, "somos un barrio que dependemos de la mar".

Tras la bendición de la nueva imagen y con el calor de decenas de personas el presidente del colectivo vecinal, José Molina, se dirigió a los vecinos. Recordó su colocación hace tres años hasta esta desaparición, "pero como veis, hoy está puesta". Elevó que mientras continúe esta junta directiva seguirán trabajando por la barriada y agradeció, aprovechando la presencia de representantes del colectivo vecinal Vista Mar de La Granja, su presencia y apoyo y apostó por aunar esfuerzos "codo con codo".

Molina además tuvo recuerdos para vecinos del barrio Antonio El viudo y Diego El Corruco, por los que pidió un fuerte aplauso, así como para más amigos, vecinos y ciudadanos. Finalmente recordó que "han sido unos días duros y no veíamos a la Virgen, pero por fin ha vuelto al barrio". El representante elevó que "sabemos que no nos dará trabajo, ni llenará la nevera, ni nos pagará el recibo de la luz, pero sí nos llenará el corazón de esperanza". El aplauso se sintió, el fervor y el "viva la Virgen del Carmen".