El Ayuntamiento se reorganiza

El Ayuntamiento de Algeciras está inmerso en una reorganización completa de su estructura en la ciudad. Con dependencias dispersas por distintos puntos de Algeciras, el Consistorio quiere agrupar parte de los servicios ahora disgregados en una nueva sede municipal céntrica, cercana al ciudadano: el antiguo Hospital Militar. Para ello está en fase de contratación de unas obras de reforma que costarán 73.000 euros y que servirán para preparar el desembarco allí de parte de los 800 funcionarios de la plantilla municipal.

El traslado de las dependencias municipales a este edificio es una promesa de 2015, cuando la Universidad de Cádiz dejó este inmueble para instalar Derecho y Relaciones Laborales en el edificio I+D+i de la avenida Capitán Ontañón. Entonces se aseguró que se moverían al inmueble las delegaciones de Feria y Fiestas, Salud y Consumo, Juventud y parte de Bienestar Social; en el pliego de las obras se incluyen como departamentos a trasladar Educación, Informática, Vivienda o Contratación. No obstante, según fuentes municipales todavía se está trabajando en esa redistribución de departamentos. Sí se tiene la idea de trasladar allí todo tipo de servicios, técnicos, económicos y administrativos, para los que se adaptará un edificio de principios del siglo XVIII que ya ha sufrido diferentes reformas.

La obra que ahora se plantea prevé mantener la distribución actual, con 3.900 metros construidos divididos en varias plantas. Aunque no está protegido, se reclama que las instalaciones se adapten al diseño arquitectónico del inmueble. Las obras consistirán en la demolición de algunas paredes; la adecuación de las salas más antiguas de la planta baja, a las que se añadirá un sistema forzado de ventilación; la instalación de electricidad y los puestos de trabajo; construcción de nuevas particiones; colocación de luminarias y pintura. Una renovación básica que se suma a la ya ejecutada hace menos de una década para que el edificio pudiera acoger titulaciones universitarias. El procedimiento de contratación de las obras está en marcha. Los técnicos municipales tienen ahora que estudiar las ofertas presentadas para que la Mesa de Contratación del Ayuntamiento pueda formular una propuesta al Pleno, que será quien aprueba definitivamente el contrato de las obras. En el plazo máximo de un mes tras la firma de este se iniciarán las actuaciones, que tendrán una duración de tres meses.

Por lo tanto, salvo sorpresa, el Ayuntamiento podrá proceder a su reorganización a lo largo del próximo año. Ahí comenzará la segunda fase de la reordenación de las dependencias municipales: determinar en qué se empleará el espacio libre que quedará en distintos puntos de la ciudad, dependiendo de qué departamentos se muden finalmente al edificio de Alfonso XI. Así, a falta de cerrar la reestructuración y si se cumplen los planes iniciales, podrían quedar metros cuadrados libres en ubicaciones como la sede de Juventud, en la calle Ramón y Cajal; la de Feria y Fiestas, en el edificio Kursaal; la Oficina del Consumidor, en el edificio de la plaza María de Molina; o las dependencias de Informática, en el Edificio Escuela. Un espacio que no se quiere dejar ocioso y que podría dedicarse a otros usos municipales, pero también a usos sociales o culturales.

De hecho, hay numerosas asociaciones y colectivos que vienen demandando un lugar al Ayuntamiento en el que realizar sus actividades. Se trata de entidades de todos los ámbitos, desde asociaciones de vecinos a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca pasando por colectivos como Aficagi o Faem, que llevan años esperando un sitio en el que desarrollar actividades terapéuticas.