El avance de la renovación de la línea Algeciras-Bobadilla tiene que resolver varios problemas ambientales. El primero, la declaración de impacto ambiental que tendrá que obtener del Ministerio de Transición Ecológica para la electrificación del tramo Ronda-Bobadilla. Y dentro de este, la posible ejecución de variantes para eludir la afección a la reserva natural de las Lagunas de Campillos y para evitar daños en la nueva vía en el tramo de Almargen.

La secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, ha informado este miércoles a los alcaldes y agentes sociales del Campo de Gibraltar de la marcha de las obras y ha explicado que se está trabajando "de una forma frenética" en el nuevo estudio informativo del tramo Ronda-Bobadilla, "en constante diálogo con las administraciones afectadas para analizar los impactos positivos y negativos". Ese diálogo trata de evitar lo ocurrido con el proyecto de la electrificación, que "creo que por una coordinación no acertada", cuando la Junta alertó en un informe del impacto de la obra y el Ministerio se basó en él para reclamar una tramitación ambiental ordinaria para la actuación con su declaración de impacto ambiental, un trámite que retrasará bastante la obra respecto a las previsiones iniciales.

Adif también está realizando un estudio de la ladera de Almargen para evitar los problemas aparecidos con las inundaciones, que "segaron la vía entera incluidos puentes y la plataforma". En total, las obras supondrán 469 millones de euros de inversión, sin tener en cuenta las posibles variantes o modificaciones de trazado.

Finalmente, Pardo de Vera apuntó que hay que dar solución a los problemas que encuentran los viajeros de tren en la comarca, ante los repetidos retrasos y suspensiones. A este respecto, señaló que en los últimos veinte años no se ha invertido en la compra de nuevos trenes ni en mantenimiento de las vías, lo que ha generado su “obsolescencia”. En este sentido, indicó que frente a los 250 millones de euros de media destinados anualmente desde 2005 a dichas materias para toda España, su objetivo es alcanzar los 1.500 millones de euros; 2020 cerró con 770 millones invertidos.