100x100 Algeciras llega para gobernar: "No somos de izquierdas ni de derechas, somos de arreglar las calles"
El partido naranja se presenta ante multitud de simpatizantes en el hotel Reina Cristina con el respaldo a Juan Franco y Miguel Alconchel
Las fotos de la presentación de 100x100 Unidos por Algeciras en el hotel Reina Cristina
"No somos ni de izquierdas ni de derechas, somos de arreglar las calles". Con estas palabras pronunciadas la noche del jueves, el presidente de 100x100 Unidos, Javier Vidal, capturó a la perfección el espíritu con el que su partido inicia su ambicioso proyecto en Algeciras. La formación, de momento sin candidato, aspira a alcanzar la Alcaldía en las elecciones de 2027, con la intención de “transformar” la ciudad a través de representantes políticos libres de las ataduras propias de los partidos generalistas.
Esta y otras intervenciones se escucharon en un abarrotado salón del hotel Reina Cristina en el que se concentraron los miembros del ya denominado 100x100 Unidos por Algeciras, respaldados por el alcalde de La Línea, Juan Franco, y el de Los Barrios, Miguel Alconchel, así como el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Tarifa y líder de Nuevos Aires, Jorge Benítez.
Unos 150 simpatizantes del partido naranja escucharon a María Vázquez decir que se trata de un partido que tiene a "Algeciras en su centro", una formación municipalista que aspira a tomar "decisiones rápidas y ágiles" sin tener que pedir permiso a nadie en Sevilla o Madrid y que, tras un año de "escucha activa" por las barriadas, va a seguir reuniéndose con las asociaciones de vecinos para elaborar con sus recomendaciones un programa electoral que responda a las necesidades reales de la ciudad.
Javier Astorga garantizó que el partido, aunque se haya integrado en 100x100 Unidos, conservará su "independencia interna" para asegurar que el municipio tendrá "su propia voz a nivel provincial y autonómico". Tiene Algeciras, en su opinión, "una relevancia estratégica que no obtiene el reconocimiento que merece" por parte de los partidos generalistas. "Necesitamos una ciudad más fuerte, más comprometida y más participativa", apostilló. "Queremos convertirnos en la voz de Algeciras", sentenció.
Andrés Jesús Maderal lanzó los primeros compromisos electorales, basados en una buena "planificación y escucha a los vecinos": mantener reuniones trimestrales con las barriadas con el equipo al completo para que "nos tiréis de las orejas", aumentar una oferta educativa que está obsoleta y fomentar entre los niños, a través de ellas, el orgullo de ser algecireño. Trabajar contra el acoso escolar, aumentar la inversión en el mantenimiento de las instalaciones deportivas y devolver a la Feria de Algeciras la categoría que ha perdido. Pero sobre todo, ir a donde corresponda a pedir el Centro de Salud de La Bajadilla, mejoras en la residencia de mayores de San José Artesano, que no se olvide (otra vez) la Ciudad de la Justicia y que los alumnos y profesores de música tengan por fin un Conservatorio con el nombre de Paco de Lucía. También, que la playa de El Rinconcillo no se convierta "en una explanada llena de grúas". En 100x100 caben todos, dijo, hayan votado al partido que hayan votado en el pasado, da igual (él mismo fue en la lista del PP en 2015), mientras sean profesionales que quieran a Algeciras y "no tenga miedo".
Entre los miembros del partido no se encontraba el abogado Manuel Barberá, quien fue el cabeza de cartel de Algeciras 100x100 en 2019.
Apoyo de La Línea y Los Barrios
Vidal explicó que el objetivo es "cambiar cada municipio a través de la acción directa en los ayuntamientos y las entidades supramunicipales". Es decir, hacer en Algeciras lo que 100x100 consiguió en La Línea, donde le dio la vuelta "a un pueblo que estaba en ruina".
El protagonista de aquella transformación, Juan Franco, consideró la ciudad algecireña "fundamental" para conseguir los "cuatro o cinco mil votos" que le darían "el tercer diputado provincial y la "llave de gobierno" para darle "mejor calidad de vida a sus ciudadanos". El alcalde linense se confesó "impresionado" por la respuesta a la convocatoria de presentación y alabó a los miembros de la formación en Algeciras. "Con esta estructura que tenemos hay estar locos, pero las cosas se trabajan y se consiguen", dijo por experiencia propia.
Franco, que se refirió al Campo de Gibraltar como "un pueblo muy grande atravesado por una enorme avenida que siempre está colapsada", pronosticó que a sus compañeros algecireños les queda un "trabajo a pico y pala". Además, algún día, "tomar medidas duras y difíciles". Cuando él ganó las primeras elecciones, narró, tuvo que tomar la desagradable decisión de bajarles el sueldo a los que eran sus compañeros de trabajo como funcionario municipal. En un Pleno tuvo que entrar escoltado por la Policía Nacional y fue recriminado por muchas personas, ente ellas una limpiadora del Ayuntamiento a la que se encontró tiempo después, al borde de las siguientes elecciones, una mañana que iba a su despacho. Entonces le dijo: "Juanito, no se me olvida que me quitaste mi dinero, pero tendré que votarte, porque ahora cobro siempre el día 28". Franco lanzó un mensaje relacionado con la anécdota: "Algeciras está en una encrucijada. Como no tome ahora medidas, dentro de diez años puede lamentarlo".
"Somos el ejemplo de que se puede", dijo Miguel Alconchel, que pidió a sus compañeros algecireños, "esfuerzo y trabajo para superar las adversidades". "Con pasión y generosidad estoy convencido de que conseguiremos un buen resultado, apostilló. "Pero sobre todos sean ustedes mismos. Juan Franco hay uno, y Miguel Alconchel hay uno. La gente huele a los impostores a kilómetros", concluyó.
También te puede interesar
Lo último
Contenido Patrocinado
Contenido ofrecido por CEU en Andalucía