Los alicantinos, que ensayan en el Mirador, buscan la campanada

El Novelda tuvo ayer por la tarde su primer contacto con el Nuevo Mirador, escenario en el que se medirá esta noche al Algeciras. La expedición alicantina partió a primera hora del día, almorzó a mitad de camino y llegó a las instalaciones de La Menacha poco antes de las cinco de la tarde. En el estadio, el rival de Copa de los albirrojos realizó un entrenamiento sin desvelar demasiadas cartas. "Ha sido más que nada para estirar las piernas después de un viaje tan largo, para que los jugadores puedan descansar bien a la noche. Por lo demás hemos aprovechado para probar dos o tres dudas que tenemos", explicó el entrenador de los verdiblancos, Rubén Albés.

El técnico vigués de los alicantinos señaló que tiene la duda, sobre todo, de Víctor Banegas ya que el medio sufrió un esguince de rodilla leve el pasado fin de semana. No desveló cambios concretos en el once pero sí deslizó que "el bloque de las dos primeras jornadas se mantendrá" con algunas pinceladas.

Albés augura "un buen partido" en un "estadio muy bonito". "He visto algo del Algeciras y puedo decir que no es el típico recién ascendido. Tiene muy buen equipo y creo que va a dar guerra esta temporada en su grupo", opinó el preparador.

El Novelda, con las únicas bajas seguras, ambas por lesión, de Borja y Castellanos, pretende desquitarse de un comienzo liguero con dos empates, el primero de ellos saldado con derrota por una impugnación debido a una alineación indebida. El club peleó la pasada cmapaña por el ascenso a Segunda B y logró el billete copero en lugar del filial del Elche, el campeón de su grupo. La mayor gesta de la entidad fue eliminar al Barcelona de la Copa en 2002.