La Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) se define como una entidad sindical, profesional e independiente cuyo fin es defender y mejorar las condiciones laborales y profesionales de los facultativos sanitarios. Desarrolla su labor con organizaciones autonómicas y provinciales. Su presencia en la zona se concreta con la acción de los delegados y afiliados del Sindicato Médico de Cádiz.

Este sindicato trabaja en Algeciras y la comarca desde siempre. Quizá no es tan conocido como lo puedan ser UGT o CCOO, por citar las centrales con mayor visibilidad, pero, según explica la organización, en la zona cuenta con una afiliación que asciende a en torno el 40% de los aproximadamente 480 médicos del Área Sanitaria. Sus delegados son José Francisco Perea y Douglas Varela, que destacan que, al margen de los afiliados, son muchos más los facultativos que se sienten representados por el sindicato.

El Sindicato Médico no recibe ningún tipo de subvención y funciona con las cuotas de sus afiliados. Está representado en la mesa de negociación del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y, a nivel local, forma parte de los organismos de participación como el Comité de Seguridad e Higiene en el Trabajo o la Mesa de Seguimiento de Contrataciones.

"Nuestro fin es defender al médico, que se le reconozca el rol que tiene dentro de la sanidad", indica José Francisco Perea. Y son tiempos difíciles para ello, según lamentan. El Sindicato Médico denuncia la precariedad que se ha instalado en la profesión, como consecuencia fundamentalmente de las contrataciones que se están realizando a menos del 100%. Añaden que tal escenario laboral, y su afectación al funcionamiento de la sanidad, está propiciando situaciones que en ocasiones están acabando en agresiones como las que se han conocido últimamente. Hay que recordar que en los últimos meses se han registrado tres incidentes de este tipo en Algeciras.

Hay algo que remarca la organización muy mucho. Las cosas podrían estar e ir mucho peor. Lo que lo está evitando, según enfatiza, es el sacrificio que están demostrando los médicos, dedicando más tiempo a su labor del que les correspondería en virtud de sus contratos. El sindicato señala que en el Área Sanitaria se da especialmente una alta eventualidad con respecto a otras de la comunidad. Estima que unos 180 médicos no están al 100%, cuando antes todos sí, y que los que continúan así lo hacen después de que se hayan aumentado las horas de trabajo de 35 a 37,5 mientras que en los últimos años han perdido un 25% de poder adquisitivo.

"Los contratos precarios hacen que se masifiquen las consultas. Están aumentado las listas de espera porque no se contrata médicos y todas estas cosas hacen que repercuta en el concepto de la dignidad del médico. Hace que se propicien situaciones que no se tendrían que dar, como la agresividad o agresiones. Situaciones que en este momento, con los contratos al 75% de médicos eventuales, con los contratos al 50%, están creando un caldo de cultivo en el que la relación del paciente con el médico cada vez se está deteriorando más", apunta Perea.

El facultativo además llama la atención sobre un hecho. "Esto crea situaciones de usuarios de primera y segunda clase, porque, si tienes un médico que está al 100%, cinco días a la semana los pacientes tienen a su médico disponible, pero si le toca un médico que está al 75% sólo tiene cuatro días a la semana médico".

"A efectos prácticos la dedicación es mucho mayor en los que están al 75% y cobran al 75%", continúa el delegado sindical. "Estamos convencidos de que el sistema se está manteniendo gracias al esfuerzo y el sacrificio de muchos compañeros", advierte. "Hay que reflejar que se está manteniendo el sistema por el esfuerzo que están haciendo los médicos, porque los contratos precarios, contratos parciales, crearían desánimo, pero la mayoría de los médicos está trabajando con ilusión y con ganas. Gracias a eso se está manteniendo el sistema y quizá al usuario no le está llegando la situación precaria por eso", abunda.

Perea considera que no es normal que se hayan registrado tres agresiones en Algeciras en tan corto espacio de tiempo. Lamenta que por una parte se extiende la precariedad, acentuada porque las contrataciones se realizan por pocos meses, lo que genera incertidumbre, pero que por el otro no se aplican todas las medidas para prevenir y evitar en la medida de lo posible ataques a los profesionales.

"Medidas disuasorias como pueda ser un guarda de seguridad en cada centro de salud o tener un timbre antipánico en las condiciones adecuadas. El médico se encuentra con que no tiene medios para defenderse", señala.