El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza urbana no subirá en este mandato por encima de lo que marque el Índice de Precios al Consumo (IPC). Así lo confirmó a Europa Sur el concejal de Hacienda, Luis Ángel Fernández, que dijo que de esta forma se daba cumplimiento al acuerdo plenario que se alcanzó en 2009 en consenso con los colectivos vecinales tras el catastrazo.

El edil del PP indicó que para los próximos cuatro ejercicios fiscales se presenta un problema con respecto a los tres anteriores, y es que ya no se pueden aplicar las bonificaciones que contemplaba la ley. Así, Fernández señaló que habrá que buscar una fórmula, bajando el tipo de gravamen, para adecuar los recibos del IBI al IPC de referencia, en principio el de agosto, que calculó rondará el 2%. El teniente de alcalde añadió que está previsto que en septiembre se aprueben las ordenanzas fiscales y que antes se va a reunir con Fapacsa para revisar las ordenanzas y abordar las medidas a adoptar. "Nuestro compromiso es congelar la presión fiscal para que en ningún caso las subidas estén por encima del IPC. En algunos puede que no llegue a lo que marque este índice", manifestó Fernández.

En lo que respecta al IBI, para contener la subida tras las bonificaciones aplicadas, el concejal de Hacienda consideró que habrá que rebajar el tipo de gravamen que pone el Ayuntamiento, que actualmente está en el tope legal del 1,10% y dejarlo en aproximadamente un 0,86%. De esta forma, dijo, ajustando los tipos en función de los indicadores de cada ejercicio se podrán adecuar los recibos al IPC.

El Pleno aprobó en diciembre de 2009 un conjunto de medidas fiscales para compensar el catastrazo, después de las dos masivas protestas ciudadanas. De esta forma, se acordó que el recibo del IBI sólo subiría en 2009 como máximo un 7%, mientras que en 2010 y 2011 se congelaría, pagando los ciudadanos la misma cantidad en los tres años. El equipo de gobierno de izquierdas también se comprometió a que entre 2012 y 2014 sólo subiría conforme al IPC, así como promover una nueva revisión de los valores catastrales para que ésta entrara en vigor en el ejercicio 2015. El paquete de medidas salió adelante con los votos del PSOE e IU, mientras que el PP se abstuvo. En aquel debate, el entonces portavoz de la oposición, José Ignacio Landaluce, aseguró que si el PP gobernaba iría más allá y en vez de condicionar la subida del IBI al IPC, apostaría por la congelación de los recibos durante el siguiente mandato.

En este sentido, Fernández dijo que habrá que buscar una fórmula al expirar las bonificaciones y reiteró que todo incremento del IBI será como máximo acorde al IPC.

El titular de Hacienda, por otra parte, anunció que el equipo de gobierno ya tiene decidido aplicar algunas bonificaciones en algunas tasas. Así, afirmó que al menos para el próximo ejercicio fiscal los quiosqueros se van a poder beneficiar de una bonificación del 20% respecto a la actual cuota que pagan al Ayuntamiento para así poder ayudarles a superar la actual situación de crisis.