Ruta por los grandes clásicos del centro gastronómico de Palmones

En la desembocadura del río Palmones (Los Barrios), a escasos pasos del parque natural de Los Alcornocales, se encuentra uno de los secretos mejor guardados del sur: el 'polígono gastronómico' de Palmones. Un rincón que guarda entre sus calles una constelación de restaurantes de primer nivel que llevan décadas conquistando paladares. Hoy recorremos cuatro de sus grandes clásicos, todos con una calificación de 4,5 estrellas en Google y una identidad marcada por la excelencia y el respeto al producto.

El Copo

Si hay un nombre que ha trascendido fronteras desde Palmones, ese es El Copo. Reconocido con premios nacionales de gastronomía y miembro de asociaciones como Eurotoques o el Club de Oro de la Mesa Andaluza, este restaurante familiar ha sabido combinar el recetario tradicional con las tendencias más vanguardistas. Su menú degustación es un festín de sabores marineros: foie de pescado, revuelto de ortigas, langostinos de Sanlúcar, bisquet de langosta, hojaldre de centollo y más. Todo por 48 euros por persona. Una experiencia que convierte cada bocado en homenaje al mar y a la tierra. E imposible dejar pasar su carta de postres, una auténtica delicia para acabar la velada.

La Ragua

Ubicado en la calle principal de Palmones, frente al parque infantil y a pocos pasos del paseo marítimo, La Ragua se presenta como un “destino turístico gastronómico” en sí mismo. Aquí, la cocina casera y tradicional se eleva gracias al uso de ingredientes frescos y al mimo en cada receta. Con un menú del día que cambia a diario, más de 50 tapas en carta y especialidades como el rape a la cazuela o el pulpito frito troceado, este restaurante es también un referente en la organización de eventos personalizados. Sus salones climatizados y su atención al detalle lo convierten en una opción tan versátil como deliciosa.

Casa Mané

A pie de playa, Casa Mané lleva el nombre de una familia dedicada en cuerpo y alma a la gastronomía del Estrecho. Este restaurante apuesta por el producto local, el marisco y los pescados frescos, con especialidades como las gambas rojas del Mediterráneo a la sal o el bacalao gratinado sobre crema de patata y cebolla caramelizada. La cocina es sencilla en apariencia, pero detrás se esconde una técnica depurada que realza los sabores sin artificios. Un enclave ideal para quienes buscan autenticidad junto al mar.

Willy 1975

Desde que “Pepe de la Playa” abriera sus puertas en 1975, el restaurante Willy no ha dejado de evolucionar sin perder su esencia. Su menú marinero, fiel al estilo clásico, incluye delicias como la fideuá, el arroz a banda o la cazuela de pescado, acompañadas por tostones con alioli, melva con pimientos y una selección cuidada de postres. Aunque la carta mantiene su alma de siempre, también hay espacio para creaciones más innovadoras como el sashimi de ventresca o el arroz meloso con setas y mariscos. Tradición y renovación, de la mano.

Estos cuatro establecimientos no solo comparten una puntuación excelente en Google, sino también una filosofía común: el respeto por el producto, el amor por la cocina y el compromiso con el comensal. En Palmones, el turismo gastronómico no es una moda, es una forma de vida. Y esta ruta, una invitación irresistible a sentarse a la mesa y dejarse llevar.