Tarifa

Las almadrabas de Cádiz culminan la temporada con la captura de 1.891 toneladas de atún

  • El sector crea más de 400 trabajos directos de febrero a julio

Una levantá en esta temporada de captura de atún rojo

Una levantá en esta temporada de captura de atún rojo / Julio González (Barbate)

Las almadrabas de Cádiz han culminado la temporada con la captura de 1.891 toneladas de atún. La campaña de pesca dio comienzo el pasado 26 de abril. Desde entonces, las cuatro almadrabas de Barbate, Conil, Zahara y Tarifa faenado hasta que han alcanzado la cuota de pesca asignada a cada una de ellas. Este miércoles, la de Zahara saldrá por última vez esta temporada para agotar su margen de pesca.

Las almadrabas de Tarifa, Conil y Zahara realizan una gestión conjunta. Durante la campaña de pesca, hacen el sacrificio del atún y trasbordan parte de las capturas a un buque, con bandera de un tercer país, de su cliente japonés, donde se realiza el procesado y congelación del atún. La otra parte de las capturas son desembarcadas en el puerto de Barbate, donde se ronquean y congelan para su comercialización directa por empresas nacionales.

La cuarta almadraba, la de Barbate, que es propiedad al 50% de la empresa Petaca Chico, no sacrifica todas las capturas durante el periodo de pesca, sino que la mayor parte, unas 4.000 piezas, las mantiene vivas en el agua mediante enormes piscinas de red fondeadas, donde procede a engordar los atunes durante el verano y finaliza la campaña con el sacrificio de los atunes enjaulados, que se realiza en los meses de septiembre y octubre. Una vez que las cuotas para la captura de atún de almadraba han sido consumidas, el atún que aun permanezca vivo en el interior del arte de pesca debe ser liberado.

El empleo generado por las cuatro almadrabas es fundamentalmente estacional desde febrero a julio, ya que se incluyen las fases de montaje y desmontaje de las almadrabas. La actividad incluye además riqueza económica y laboral en otros sectores, como la industria procesadora, congeladora y comercializadora, que vende atún rojo durante todo el año; la industria auxiliar naval, que aporta el alimento a los atunes vivos que Barbate mantiene para su engorde, y el turismo, que aprovecha la creciente popularidad del producto como reclamo gastronómico y lúdico relacionado con el atún. Son más de 400 empleos entre fijos o fijos discontinuos directos que dependen de la actividad de las almadrabas.

El control e inspección de las almadrabas

De acuerdo con Reglamentación Comunitaria, la Secretaría General de Pesca debe inspeccionar el 100% de las operaciones de pesca y sacrificio que se realicen en esta pesquería. En Cádiz, esa labor la realiza el Servicio de Inspección de Pesca, de la Dependencia de Agricultura y Pesca de la Subdelegación del Gobierno en Cádiz, en colaboración con la la patrullera Guadalete del Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

El subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Pacheco, felicitó este martes a los miembros de la patrulla Guadalete de la Guardia Civil y a los efectivos de la Inspección provincial de pesca por su labor durante la campaña. Los inspectores explicaron a Pacheco que las almadrabas gaditanas presentan un altísimo grado de cumplimiento de la normativa, destacando su colaboración con los inspectores de pesca.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios