Despedida una trabajadora de una residencia de Guadalajara tras un vídeo vejatorio hacia una anciana: "Me da mal rollo darle de comer, parece de una peli de miedo"

La dirección de una residencia de mayores de Azuqueca de Henares (Guadalajara) ha procedido al despido inmediato de una auxiliar sanitaria y ha presentado una denuncia ante la Guardia Civil después de que se viralizara un vídeo en el que una empleada mostraba una actitud vejatoria hacia una de las residentes.

El incidente ha provocado una profunda conmoción entre el personal del centro, compuesto mayoritariamente por mujeres, así como en la dirección y en el sector Sociosanitario de UGT en Castilla-La Mancha. En las imágenes, difundidas este fin de semana, se puede ver y escuchar a la trabajadora, que había sido contratada para realizar una sustitución de verano, expresando palabras de desprecio hacia una persona mayor.

"Está más muerta que viva"

"Me da tan mal rollo venir a darle de comer a esta mujer. Parece que sale de una peli de miedo, tía", se escucha decir a la joven en el vídeo. "Quedarme con ella a solas, es que, me da un chungo. Está más muerta que viva. Me da mucho miedo de esta tía", añadía en las imágenes que se han difundido ampliamente.

La actuación de la dirección fue inmediata. Tras conocer los hechos, abrieron un expediente disciplinario contra la empleada, que había sido contratada en junio para cubrir una sustitución, y este mismo domingo le comunicaron mediante burofax que no regresara al trabajo. Además, presentaron una denuncia ante la Guardia Civil por presuntas vejaciones.

Actuación inmediata

La residencia contactó rápidamente con la familia de la anciana afectada y emitió un comunicado al resto de familias con residentes en el centro, informándoles de las medidas adoptadas "para que esta trabajadora no vuelva a pisar la residencia", según señala el documento al que ha tenido acceso Europa Press.

Asimismo, se notificó lo ocurrido tanto al Ayuntamiento de Azuqueca como a la Consejería de Bienestar Social, quienes han mostrado su apoyo al centro. "Todos los profesionales de la residencia estamos consternados por este hecho y agradecemos las muestras de apoyo que estamos recibiendo", señala el comunicado.

"Los que nos conocéis, sabéis que llevamos muchos años dedicándonos en cuerpo y alma a la atención y cariño hacia las personas mayores que viven con nosotros y no sería justo que esta dedicación se viera empañada por la actuación de esta persona, que para nada nos representa", añade el texto.

Difusión del vídeo y protección de datos

El vídeo se difundió a través de un perfil de TikTok la madrugada del sábado al domingo, aunque no corresponde al perfil de la trabajadora despedida. No obstante, desde la dirección condenan el mero hecho de haberlo realizado.

Al tener conocimiento del vídeo, la dirección tomó la decisión de despedir a la trabajadora "de manera automática" y, entendiendo que podía constituir un delito de vejación a personas mayores, lo denunciaron ante la Guardia Civil. "Hemos intentado actuar con la máxima rapidez y transparencia", han explicado fuentes de la dirección, subrayando que una persona que habla así de un mayor no puede continuar trabajando en el centro.

Además, han presentado una denuncia ante la Agencia de Protección de Datos por la difusión de la imagen de la residente en redes sociales, considerando que se trata de una persona vulnerable cuyos derechos deben preservarse.

UGT presenta una denuncia contra la trabajadora

Por su parte, el sector Sociosanitario de UGT Servicios Públicos Castilla-La Mancha también ha presentado una denuncia contra la trabajadora implicada.

Esther Soto, responsable del sector Sociosanitario de UGT Servicios Públicos en Castilla-La Mancha, ha calificado de "sinvergüenza" a la joven. "No tiene ninguna justificación lo que ha hecho", ha señalado en referencia al vídeo realizado por la trabajadora. "Me llevan los demonios. No hay derecho. Lo de esta señora no tiene nombre y espero que se le caiga el pelo. Es vergonzoso", ha añadido, recalcando que las trabajadoras de las residencias no se identifican con este tipo de comportamientos.

Tras este incidente, la residencia ha recibido algunas llamadas anónimas con descalificaciones, algo que lamentan desde la dirección, haciendo hincapié en que lo ocurrido es fruto de una acción "individual e injustificable" de una persona y que, por tanto, no debe trasladarse al conjunto de los trabajadores del centro.