La Trinidad derrama fervor en San José Artesano al paso del Cristo

Las Tres Caídas vuelve a sentir el cariño de su gente a lo largo de su gran paseo por la ciudad.

Pastora de Algeciras dedica sus saetas al Cristo y la Virgen en la salida de la iglesia.
Pastora de Algeciras dedica sus saetas al Cristo y la Virgen en la salida de la iglesia.
María E. Selva Algeciras

25 de marzo 2016 - 01:00

El Cristo de las Tres Caídas y María Santísima de la Trinidad desfilaron ayer arropados por un barrio volcado en sus imágenes. La plaza de la Santísima Trinidad se colmó con cientos de personas que aguardaban la salida en procesión de la hermandad de San José Artesano. Parecía que tenía prisa en salir y dos minutos antes de las seis de la tarde el diputado de procesiones llamó a la puerta del templo, rogando que la apertura de puertas marcase el camino de la procesión de mayor recorrido de la Semana de Pasión algecireña.

La primera levantá del Cristo, en el interior del templo, rompió el primer aplauso que llegaba con eco a la plaza. Empezó el desfile de penitentes y mujeres de mantilla con negro de rigor, la llama de los cirios se aferraba a los tibios rayos de sol que mantenían el calor del Jueves Santo.

Un "viva el Cristo de las Tres Caídas" dio aliento a los costaleros que de rodillas sacaron a la imagen para evitar que la cruz topase con la cornisa de la puerta. Los capataces marcaban con cautela el ritmo: "Bien señores, bien, valientes, muy bien". La música irrumpió por parte de la banda Santa Bárbara de La Línea y el Cristó se alzó al cielo a las 18:09 horas. Una guitarra empezó a desgarrar sentimiento y la voz de Pastora de Algeciras le brindó una saeta que inundó de emoción a los fieles presentes. Mientras el silencio tomaba posesión se colocó el poste transversal en la cruz, quitado para poder salir del templo.

Le tocaba el turno a la Trinidad, gran venerada por los vecinos de San José Artesano. A ella la cargaban las costaleras. Pasaban las 18:37 horas cuando se presenció la primera levantá fuera de la iglesia. La banda municipal Virgen de la Palma le hizo el solemne acompañamiento. A la Virgen también le esperaba la saeta de Pastora. El viento tomó parte en la plaza, bañado por un manto de frío y la imagen empezó sus desfile por las calles de la barriada de San Roque.

La hermosura de las imágenes fue arropada a casa paso del desfile. Entre sus puntos de referencia estaba la avenida Bruselas, la Virgen del Carmen, Capitán Ontañón, Regino Martínez, la Carrera Oficial para hacer su estación de penitencia y así volver sobre sus pasos para descansar en su templo, estando prevista la recogida sobre las dos de la mañana.

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