Amenazas, agresiones y un plomazo en la cabeza: el infierno en casa de una pareja de la Estación de San Roque

San Roque/Domingo R. M. es un vecino de la Estación de San Roque que asegura vivir un infierno en su propia casa. Este hombre de edad adulta, que certifica un grado de discapacidad física del 47%, se ha dirigido a Europa Sur para alzar la voz ante una situación que considera "insostenible" con un grupo de vecinos. Domingo acumula denuncias y varias condenas a su favor en los últimos tres años y mantiene causas judiciales abiertas por amenazas, agresiones leves y graves y edificación irregular. Entre todo lo que este vecino afincado en San Roque relata hay un episodio que, subraya, pudo costarle la vida: un perdigonazo en la cabeza que se le alojó en el lado izquierdo del cráneo.

Todo comenzó, según relata siempe Domingo, cuando en marzo de 2021 adquirió una vivienda de la calle Ríos en la Estación de San Roque. "Al poco de estar allí, un día entraron en mi casa y me abrieron los grifos", sostiene este hombre, que aporta cada una de las denuncias y los procesos que ha vivido desde entonces.

Domingo y su esposa señalan a un grupo de vecinos compuestos por tres hombres y una mujer, con quienes en la actualidad mantiene denuncias cruzadas, varias ya archivadas. "Ellos me denuncian a mí por lo mismo que yo les he denunciado a ellos. Lo hacen de manera falsa, es su modus operandi para seguir acosándome", afirma.

Los encontronazos con estos vecinos, según Domingo, han sido constantes. Entre las denuncias que adjunta hay una condena a su favor en 2022 por delito de lesiones leves en el pómulo y los hombros, así como una orden de alejamiento. "Me han bloqueado la cerradura, lanzado piedras, insultado, agredido con una manguera y hasta con productos químicos", señala Domingo en referencia a otras denuncias interpuestas en los tres últimos años en los Juzgados de San Roque.

Una de las agresiones más delicadas tiene que ver con unos hechos ocurridos en agosto de 2024, el pasado verano, cuando Domingo se encontraba reparando la puerta -según el atestado- y recibió un disparo desde arriba que le impactó en el lado izquierdo de la cabeza. El afectado denunció que había sido uno de los vecinos con los que mantiene litigio. Domingo, tras acudir dos veces a un centro de salud, vio como le retiraban "un objeto extraño redondo sugestivo a perdigón" de una herida que precisó sutura. "Me pudo costar la vida", recuerda.

El problema no queda solo en "una convivencia insufrible", ya que Domingo ha denunciado también ante el Ayuntamiento una posible edificación irregular de los vecinos en cuestión: "Están construyendo sobre mi casa de manera ilegal", lamenta.

Domingo se muestra desesperado, se derrumba entre lágrimas y se siente desamparado por la Justicia. "Quiero que se sepa mi situación. Vivo amenazado aunque ya no me da miedo. Quieren echarnos desde el día que llegamos y nos hacen la vida imposible", insiste.

El denunciante asegura que hay más personas afectadas en los alrededores de su domicilio por esta situación: "Son unos vecinos agresivos y violentos, conocidos en el barrio", dice Domingo, que afronta su día a día en muletas tras una operación en la columna que le permitió dejar la silla de ruedas.

En su visita al domicilio de Domingo, el fotógrafo de Europa Sur fue grabado y fotografiado con un móvil por uno de los vecinos señalados por este ciudadano de la Estación.