la estantería

'Los impostores'. Un thriller psicológico escrito magistralmente por un joven de diecisiete años

  • Esta obra, que nació durante el confinamiento, ha llevado a su autor a conseguir el Premio Literario Jordi Sierra i Fabra Para Jóvenes

Portada de 'Los impostores'.

Portada de 'Los impostores'.

Leo muchos premios de literatura de "adultos", todos ellos con ganadores conocidos, populares y famosos, pero el premio que espero con más gana es el Premio Literario Jordi Sierra i Fabra Para Jóvenes. Premio para jóvenes y de los "jóvenes", ya que el premiado es un joven menor de dieciocho años y que no ha publicado con anterioridad.

El objetivo de este premio es estimular en los estudiantes españoles y latinoamericanos el placer por la creación literaria y el amor por la palabra escrita a través de obras que reflejen valores universales de paz, amor, concordia y respeto, con los que contribuir a crear un mundo mejor, lleno de esperanza, en el que los libros tengan un papel esencial y crezcan de forma constante nuevas generaciones de autores. Este año han participado jóvenes de once países.

La novela ganadora de este año, Los impostores, es un interesante thriller de terror psicológico que nos encadena en una montaña rusa de sensaciones desde el primer capítulo. Lowell y su hermana Abbie viajan en el coche de su padre, ¿huyendo? El deseo de Lowell es ser escritor. Está ultimando una novela de terror. A través de internet ha conocido a la psicóloga Queene; ella le entregará distintos estudios sobre esquizofrenia que le ayudarán a finalizar su novela. Lowell desea ser el mejor contador de historias de intrigas, el futuro Stephen King. La parada en la mansión "Edevane" en busca de esos estudios no es tan rápida como los hermanos esperaban.

El matrimonio dueño de la mansión, Oswald y Queene Edevane, son una pareja perfecta, agradables, muy acogedores. Los hermanos protagonistas deben esperar cinco días para recibir la pieza de su coche averiado, por lo que aceptan el ofrecimiento de ayuda de este matrimonio y se instalan en su bella casa.

El matrimonio tiene un hijo, Wyalt. Era un chico risueño, abnegado, agradable, extrovertido, divertido, le encantaba a todo el mundo. Ahora está encerrado en su habitación, encerrado en sí mismo, es arisco e insensible por culpa de su esquizofrenia producida por la pérdida de su mejor amiga. Queene, su madre, como psicóloga ha tratado a multitud de pacientes esquizofrénicos, jóvenes y adultos, pero no sabe cómo curar a su hijo.

Un personaje muy importante de la historia es la Mansión. Está llena de viejos demonios, acechantes por las habitaciones que se encuentran cerradas, seres que observan por las rendijas de los tablones del suelo, por criaturas que intentan huir de la propia Mansión.

César Carrasco García indica que Los impostores es fruto "de los días más duros del confinamiento", cuando escribir "se convirtió en una vía de escape y de entretenimiento". El jurado comentó en la entrega del premio que este libro "es capaz de atrapar desde el comienzo, con un final inesperado y con una narrativa sugerente que interpela de manera constante al lector, llenándolo de dudas y preguntas hasta la última página". Se nota que Stephen King es uno de sus autores favoritos: En la persecución de Oswald, la Mansión se convierte en un laberinto de inmensas habitaciones y eternos pasillos como en el Hotel de "Inmenso resplandor". César también le pone banda sonora, es el sonido del violín de la buhardilla con majestuosas notas, rítmicas y aceleradas, ¿será el de Psicosis? César Carrasco, Totana (Murcia), con 17 años recibió el premio en su centro educativo, IES Juan de la Cierva y Codorníu. Desea ser profesor de Filología Hispánica y, por supuesto, escritor.

Esta reseña es algo más larga, pero con ella no solo deseo animar a leer a los jóvenes adolescentes, sino animarlos a escribir y a participar en concursos literarios como este.

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