"El duende opera sobre el cuerpo de la bailarina como el aire sobre la arena. Convierte con mágico poder una muchacha en paralítica de la luna, o llena de rubores adolescentes a un viejo roto que pide limosna por las tiendas de vino, da con una cabellera olor de puerto nocturno, y en todo momento opera sobre los brazos con expresiones que son madres de la danza de todos los tiempos". Federico García Lorca explicó en su conferencia Teoría y juego del duende ese "poder misterioso que todos sienten y que ningún filósofo explica" e inspirado en su texto presentó ayer Pilar Tavora en el Palacio de Congresos de La Línea sus Cuatro lunas, un espectáculo flamenco en el que participan cuatro artistas de calado: Arturo Pareja Obregón en la música, Rafael Amargo en la coreografía, Laura Gallego al cante y Diego Amador en la dirección musical. Participan Israel Varela en la batería y Jesús Garrido al contrabajo. No hay guitarra.

Cuatro Lunas es una inmersión en un universo estético, poético y musical andaluz que cautiva al espectador. Es una propuesta escénica como únicamente sabe plasmar Pilar Távora y donde el ambiente, el piano, las voces y el baile crean la atmósfera de un espectáculo único, con duende.

Tavora se impregnó de La Línea por la tarde y así lo reflejó en Twitter: "Mirando unos minutos esta belleza que une al Mediterráneo y al Atlántico para tomar energía y luz para Cuatro Lunas" escribió junto a una fotografía de la costa linense.

Tras el brillante estreno en La Línea, Cuatro Lunas comenzará una gira internacional, que pasará por países de América y Europa, pero también por ciudades españolas como Madrid, Barcelona, y Sevilla.