El Corral de comedias se despide en el Hotel Triana
'La vida es sueño: el bululú' revive el Madrid del Siglo de Oro Giraldillo de Comedias, por su parte, llena de sainetes la Plaza del Museo
La vida es sueño: El bululú se depide hoy del público dentro de la programación del Corral de comedias de Triana. Dirigida por El Aedo y protagonizada por Jesús Torres, esta obra recrea el Madrid de 1648, contexto en el que los teatros de la ciudad han sido cerrados por orden real y en el que los actores están siendo perseguidos.
Como arquetipo de los pregones de los alguaciles que se hacen eco de la prohibición, la escena se centra en el sótano de la conocida Taberna del Turco, donde un joven actor -Sebastián de Prado, afamado comediante de la época- interpreta los primeros versos de La vida es sueño.
No sólo declama las estrofas calderonianas, el personaje también destripa los entresijos de la obra, detalla anécdotas acerca del autor e incluso enseña el hatillo de su familia y pide ayuda para usar la utilería. Se trata de un viaje que aproxima al espectador al ambiente del Siglo de Oro español y que disecciona el funcionamiento de los corrales de comedia y las compañías de la legua.
Para mañana quedará la puesta en escena de La venta de los gatos, una ópera que combina teatro, cante y baile flamenco a cargo de la Compañía di Tempo. Con ella se cerrará esta décima edición de Corral de Triana, una cita que se viene desarrollando desde el día 10 en el antiguo Hotel Triana y que cuenta con la organización de la compañía Viento Sur Teatro.
Pero no es ésta la única propuesta escénica que hoy invita en Sevilla a mirar al pasado. La vida es sueño: el bubulú comparte protagonismo y hora (22:00) este sábado con el Giraldillo de Comedias, que interpretará en la Plaza del Museo una selección de sainetes. Con la dirección de Rocío Rodríguez y con la pretensión de llevar el teatro al público, y no al contrario, estos breves fragmentos y entremeses buscarán las risas de los asistentes recurriendo a textos de Serafín y Joaquín Álvarez Quintero y de Pedro Muñoz Seca y Pedro Pérez Fernández.
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